El Mesías prometido al hijo de Noé – Shem

A medida que se multiplicaba la población humana también se multiplicaba el pecado y la transgresión. La humanidad llegó a una etapa en que la iniquidad estaba tan difundida que aun los “hijos de Elohim” se unieron con las “hijas de los hombres” en las orgías de pecado. Entonces se pronunció juicio sobre toda la creación, excepto Nóaj y su familia de ocho, porque Nóaj era un hombre justo que caminó con Elohim.

Después del diluvio, Nóaj plantó una viña y un día bebió en exceso. En una condición embriagada se quedó desnudo en su carpa. Su hijo menor, Ham, miró la desnudez de su padre de una manera pecaminosa. Después de recobrar la sobriedad, Nóaj pronunció una bendición sobre sus dos hijos mayores, Shem y Yéfet, y una maldición sobre el hijo de Ham, Kenaan.

Sem Cam y Jafet.jpg

Sem, Cam y Jafet

Génesis 9:26-27 – “…Y dijo: Bendito sea el Señor Di-s de Shem; y Kenaan sea su siervo. Elohim agrande a Yéfet, y que more en las carpas de Shem…”

Por esta bendición, se hace claro que la promesa de un Mesías se estrecha hacia Yéfet o Shem. Los comentaristas judíos ven en Yéfet la raíz hebrea yaft, lo cual implica que los descendientes de Yéfet serían físicamente más atractivos que los de Shem.

Citan un salmo donde la palabra yafyafita se traduce:

“…eres el más hermoso…”

Parecería entonces que Yéfet tendría una ventaja genealógica sobre Shem. Sin embargo el Talmud sugiere que la verdad es lo contrario:

“Está escrito: …Que Elohim embellezca a Yéfet y Él morará en las carpas de Shem.‟ Significa que aunque Elohim le da belleza a Yéfet, Él mora en las tiendas de Shem”

De ahí que, aunque Yéfet posea un atractivo físico, Shem tendría la presencia física del Mesías morando en sus carpas. Como se contiene en otro pasaje talmúdico:

“Que Elohim embellezca a Yéfet‟ significa que la belleza de Yéfet estaría en las carpas de Shem”

Por consiguiente, muchos de los hermosos pueblos yaféticos serían atraídos hacia el Mesías y hacia Shem en cuya carpa “mora” el Mesías. De hecho, la raíz hebrea para morar es Shakján, la misma raíz para Shekjiná, la morada, o presencia de Elohim.

De los descendientes de Shem, el Poderoso escogió a Abraham, y de éste, mediante Isaac y Yaakov, evolucionó la nación judía. Los descendientes de Yéfet eran todos gentiles. Los gentiles serán atraídos hacia el Todopoderoso a través del Mesías que vendrá de la simiente de Shem. El Targúm denominado Pseudo-Jonatán lo explica de la siguiente manera:

“Que Elohim embellezca la frontera de Yéfet, y sus hijos vendrán a ser prosélitos y morarán en las moradas religiosas de Shem”

Por este contexto se hace claro que el Mesías vendrá de la simiente de Shem, aunque muchos no-semitas serán atraídos hacia Shem y por tanto hacia el Mesías. Traducido, esto significa que muchos pueblos no-judíos amarán al pueblo judío y verán al Mesías por causa de ellos.


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1 comentario en “El Mesías prometido al hijo de Noé – Shem

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