En este articulo estudiaremos acerca de la lengua maligna, y que tan importante es el poder refrenar nuestra lengua que a pesar de ser un miembro tan pequeño puede contaminar todo nuestro cuerpo.
Es por eso es tan importante el poder ver a la luz de las Escrituras que tan perjudicial es «lashón hará – לשון הרע – (lengua maligna)» y como poder madurar en nuestra fe teniendo en cuenta la Escritura para así poder caminar en rectitud con nuestras palabras y con nuestro trato hacia los demás, comencemos…
- Introducción:
La capacidad de hablar es la cualidad que define al ser humano. Ningún otro ser tiene la capacidad de comunicarse de modo elocuente, creativo y sensible. Como veremos, las palabras del hombre poseen una fuerza casi cósmica para moldear el universo, tal como Dios originalmente creó al universo con Su palabra.
¡Nuestras palabras incluso tienen la capacidad de alterar la realidad del tiempo, a las personas y a los objetos!
Pensando en esto, podremos entender por qué shemirat halashón (cuidar la palabra) tiene tanta importancia en el judaísmo y en las Escrituras.
“Palos y piedras pueden quebrar mis huesos, pero las palabras nunca me dañarán”, dice una conocida canción infantil en inglés. De acuerdo a la Palabra, nada puede estar más lejos de la realidad.
El poder de la palabra, la cualidad que define y distingue a la persona, puede ser extraordinariamente constructiva o, en caso de ser mal utilizada, una fuerza altamente destructiva en el universo.
El poder que ejercemos al hablar va más allá de lo que podemos percibir:
Imagina ir al cajero automático de tu banco, insertar tu tarjeta magnética y realizar una simple transacción y que al salir te informen que acabas de transferir $17 billones del tesoro de un país hacia el tesoro de otro país provocando con esto una devastadora quiebra.
¡Nosotros pensamos que simplemente estamos intercambiando unas pocas palabras cuando de hecho estamos moviendo mundos enteros!
Lo que encontraremos al explorar la filosofía y las leyes del habla correcta, es que aquello que aparentemente son piezas benignas de información son en verdad factores claves y sumamente potentes en nuestra relación con Dios y respecto a la manera de vivir nuestras vidas como cristianos. El lashón hará de hecho es tan poderoso que puede llegar a borrar los méritos de toda una vida de estudio de la Palabra y de observancia de los mandamientos del Eterno.
- Definiciones:
Las seis categorías de Lashón Hará:
Intentemos entender las categorías de lashón hará que corrompen la sociedad para poder tomar las medidas necesarias para poder terminar con este problema de raíz.
Estas categorías las mencionamos al principio de esta enseñanza, ahora las veremos mas pausadamente.
1. Lashón hará: cuando alguien relata información derogatoria sobre otra persona. Aún cuando el relato sea completamente cierto se considera lashon hara.
Ej: “David es un hipócrita, no dice lo que piensa”
Veamos dos clases de lashón hará:
- Palabras Despectivas – que pueden provocar que las personas piensen mal de la persona de la cual se habla.
- Palabras Dañinas – que pueden provocar un daño físico, emocional o financiero a la persona.
Lashón hará consiste en palabras despectivas sobre otra persona y está prohibido decirlo incluso cuando lo que se dice es cierto.
Existe una transgresión mucho peor que la de rejilut, que también se encuentra incluida en
la prohibición de “no vender chismes”. Ésta se conoce como lashón hará, o palabras despectivas. Esto se refiere a alguien que habla de manera peyorativa sobre otra persona –incluso si lo que dice es cierto…
Alguien que habla lashón hará dirá cosas negativas y despectivas, tales como “Fulano hizo esto…” o “Los padres de Mengano hicieron esto otro…” o “Oí esto sobre Fulano”.
El lashón hará también consiste en palabras que provocan daño, aunque no sean abiertamente peyorativas, pero que de todas maneras causan un daño físico, emocional o financiero (esto incluye provocarle a otra persona dolor emocional o asustarla).
Por ejemplo, si alguien dice que Levi no es “el más inteligente”, eso puede provocarle una pérdida financiera porque puede llegar a desalentar a otra persona de convertirse en su socio.
2.Rejilut: Palabras que provocan peleas. – Cuando alguien le reporta a otro lo que han dicho o lo que han hecho en contra de él, se llama rejilut.
Ej: “Abraham me comentó que tu eres muy arrogante”
Levítico 19:16 – «Se nos ordena no ir de un lugar a otro llevando chismes»
Se refiere a una persona que dice: “Fulano dijo tal y tal cosa sobre ti” o “Mengano te hizo esto…” A pesar de que la información intrínsecamente puede no ser negativa [de todas maneras puede llegar a provocar peleas entre las partes involucradas]… Debido a que esta persona lleva información de una persona a otra, se lo llama un “vendedor” (rajil) es decir [un vendedor ambulante de chismes].
La gravedad del pecado de rejilut es que reemplaza la paz por peleas y odio, y puede desembocar en la destrucción de familias y comunidades.
Es incalculable el daño que puede aparejar el intercambio de chismes. Esto provoca odio entre las personas y en consecuencia los lleva a transgredir la prohibición de
“No odiarás a tu hermano en tu corazón” [Levítico 19:16].
El mundo continúa existiendo solamente basado en la paz, y alguien que lleva chismes de persona en persona provoca la destrucción del mundo.
3. Motzi shem ra: Se trata cuando alguien relata información derogatoria y falsa sobre otra persona, aunque sea en parte verdadera, esto se llama motzi shem ra.
Cuando el lashón hará es mentira, se lo considera motzí shem rá (calumnia).
4. Onaat devarim:
La Palabra considera que el dolor provocado por las palabras es tan real como una herida física. Esto se opone a la creencia común respecto a que las palabras no pueden herir.
Está prohibido hablarle a una persona de tal manera que eso le provoque dolor emocional o que lo avergüence.
Se nos ordenó no provocarle a los demás angustia emocional con nuestras palabras [onaat devarim]. Esto incluye afirmaciones que le provocan a la otra persona dolor, enojo o vergüenza…
La escritura en la Palabra es: “No ofendas a tu prójimo y temerás a tu Dios” [Levítico 25:17].
La aguda conciencia de la Torá respecto al poder de las palabras, considera que onaat devarim es tan real y en cierto sentido aún más serio que el daño físico o financiero que las personas pueden provocarse entre ellas.
La prohibición contra onaat devarim dice que cada perosan debe enfrentar las situaciones difíciles con el enfoque más suave posible, utilizando las palabras y la manera más amables que puedan emplearse para transmitir el mensaje.
A continuación ofrecemos algunos ejemplos de onaat devarim:
Comentarios insultantes:
“¡Te lo dije!” “¡Qué pregunta más tonta!” “¡Es todo por tu culpa porque…!”
Recordarle a alguien su comportamiento erróneo o tonto en el pasado:
“Recuerdo cuando tú…”
Usar un apodo con la intención de provocar una molestia: “viejo”, “bebote”, “chiflado”.
5. Avak lashon hara: Cualquier expresión o reporte que no es en si lashon hara, pero causará que se hable lashon hara.
Ej: “Mejor no hablemos de sara, no te quiero contar lo que hizo”
Mientras que las cuatro primeras categorías son prohibiciones de la Tora, los antiguos sabios de la Torá consideraron adecuado incluir dentro de esta trasgresión todo aquello que se encuentro en el límite de constituir lashón hará.
El término que se utiliza para referirse a esta categoría es avak lashón hará, lo cual literalmente significa “polvo de lashón hará”.
Algunos ejemplos de avak lashón hará.
- “¿Quién hubiera pensado que Fulano terminaría siendo lo que es hoy en día?”. [Implicando que en el pasado esa persona tenía una mala reputación].
- “Mejor no hablar de Mengano. No quiero decir lo que pasó con él”. [Implicando que hay algo malo respecto a esa persona].
- Hablar positivamente de una persona delante de sus enemigos, porque eso seguramente provocará que ellos comiencen a hablar negativamente sobre ella.
- Hablar lashón hará sin malicia sino más bien como una broma o como un comentario superficial.
- De manera similar, alguien que finge inocencia, como si no tuviera conciencia de que en verdad está hablando lashón hará.
Ejemplos de este último caso son:
• “Yo no pensé que había algo malo en esto” – “¡Oh! No sabía que esto es lashón hará”.
Aunque no se incluye dentro de la prohibición de lashón hará, también hay que tener cuidado en divulgar información que te hayan confiado como un secreto o de manera confidencial.
6. Avak rejilut: relatar a otro lo que otra persona ha insinuado sobre él a través de gestos o expresiones o incluso a través de avak lashon hara.
Ej: “David me iba a contar algo sobre ti pero dijo que prefería no hablar lashon hara”
En términos simples, esto significa que uno no puede decirle a su amigo que otra persona hizo algo malo. Uno no puede hacer un comentario que pueda llegar a traerle a la persona sobre la cual se está hablando daños físicos, psicológicos o económicos. Cualquier comentario que pueda desmerecer a la persona de la cual se habla a los ojos de aquel que escucha debe ser evitado.
Sin embargo, lo previamente establecido no se aplica en todas las situaciones.
Existen situaciones en donde se requiere que hablemos, como por ejemplo, prevenir a alguien sobre un posible socio de negocios o acerca de una pareja para casarse.
Para saber cuándo hay que permanecer en silencio y cuándo hablar se debe estudiar en profundidad un extensivo código legal. Y si tomamos a la Torá como nuestra guía, podemos aprender qué se debe y no se debe decir en las distintas situaciones.
¿Por qué cuidar lo que uno dice es tan importante?
Si miras en casi cualquier matrimonio destruido, en amistades destruidas o en una carrera arruinada, verás que el daño fue causado generalmente por el odio. Y ¿de dónde vino ese odio? Generalmente comienza con algunas palabras dañinas.
Salmos 34:13-14 – “¿Quién es el hombre que desea la vida, que ama los días para ver el bien? Cuida tu lengua del mal y tus labios de hablar engaño”
Proverbios 21:23 – “Aquel que cuida su boca y su lengua, cuida su alma de problemas”
Proverbios 18:21 – «La muerte y la vida están en poder de la lengua, Y el que la ama comerá de sus frutos»
Según los sabios quien quiera que hable Lashón hará es considerado como si negara la existencia de Dios como está escrito en el Salmo 12:5 – “Los que dijeron: Con nuestras lenguas dominaremos, nuestros labios nos pertenecen, ¿Quien es Señor sobre nosotros?”
¿Por qué se ha vuelto esta transgresión permitida en los ojos de la gente?
Porque no saben que Lashon hara (lengua maligna) se aplica aún cuando lo que hablas acerca de alguien es información verdadera como mencionamos.
Aún cuando mezclas tus apreciaciones con la verdad de los hechos y la haces un tema entre otras personas que no han participado directamente, cometes el pecado de lashon hara, siendo este igual que cometer asesinato.
Satanás te convence con el argumento de que la gente de la cual vas a hablar, es gente hipócrita y pecadora y entonces es meritorio hablar mal sobre ellas.
Esto es similar a lo que dijo la serpiente a Eva en Génesis 3:1:
“¿Acaso YHVH dijo que no comas de ningún árbol del jardín?”
En resúmen, “lashon hara” resulta en maldición, no sólo al que lo inicia, sino que también al que presta oído y mas aún lo recibe, repitiendo y divulgando esa palabra entre el pueblo
- ¿Quien quiere vida?:
Ocurrió en una ocasión que un vendedor ambulante llegó a la ciudad de Tzippori y en voz alta exclamó: “¿Quien quiere una medicina que da vida?” Una multitud rápidamente lo rodeó para pedir la poción que él ofrecía.
Rabbi Yannai estaba sentado en su balcon estudiando Torá. Al oír el anuncio del vendedor, Rabbi Yannai le llamó y le dijo: “Sube aquí y véndeme tu poción” El vendedor le respondió: Ni tu ni los que son como tu necesitan esta poción. Sin embargo Rabbi Yannai insistió y el vendedor subió para verlo. El vendedor abrió el libro de los Salmos y le leyó el verso (34:13- 14): «¿Quién es el hombre que desea la vida y ama los días en los que pueda ver el bien? Cuida tu lengua del mal y tus labios de hablar engaño«.
El Rey Salomón declaro también: “Quien cuida su lengua y su boca, cuida su alma de sufrimientos” (Proverbios 21:23).
Rabbi Yannai reflexionó y dijo: “Toda mi vida he leído este verso y nunca percibí el significado profundo hasta que llegó este vendedor”
Veamos una historia concerniente a este tema, la siguiente historia ilustra la gravedad de hablar lashón hará.
El Jafetz Jaim (Rab Israel Meir Kagan, 1838-1933) y otro rabino partieron en una ocasión en un viaje de tres días para ocuparse de las necesidades espirituales de un pueblo en algún lugar de Polonia. En el camino se detuvieron en una posada en la cual les prepararon una mesa especial, porque la dueña del restaurante reconoció a los prestigiosos rabinos. Ella se preocupó de que los atendieran de inmediato y cuando terminaron de comer se acercó y les preguntó:
– ¿Qué les ha parecido mi comida?
– Muy buena –dijo el Jafetz Jaim-. Realmente estaba excelente.
– Oh, estaba bastante bien –dijo el otro rabino-, pero yo le hubiera agregado un poquito más de sal.
Mientras la mujer se alejaba el Jafetz Jaim empalideció y exclamó:
– ¡No puedo creerlo! ¡Toda mi vida evité hablar o escuchar lashón hará y ahora D’os me hizo viajar con usted y tengo que sufrir oyéndolo hablar lashón hará! Lamento haber viajado con usted y estoy seguro de que el propósito de nuestro viaje no es puramente debido a una necesidad espiritual. De otra manera esto no me habría ocurrido.
Al ver la reacción del Jafetz Jaim, su compañero se asustó.
– ¿Qué he dicho que fuera tan terrible? ¡Dije que la comida estaba rica y sólo agregué que necesitaba un poquito más de sal!
– ¡Usted no comprende el poder de las palabras! –gritó el Jafetz Jaim-. Probablemente esta mujer no cocina por sí misma. Su cocinera puede ser una viuda pobre que necesita este trabajo para mantener a su familia. Ahora, debido a lo que usted ha dicho, la propietaria irá a la cocina y se quejará con la cocinera porque la comida no tenía su ciente sal. Para defenderse la pobre viuda dirá: “Por supuesto que le pongo su ciente sal a la comida. Incluso la pruebo antes de servirla”.
– La dueña la acusará de mentir y le dirá: “¿Acaso quieres decir que estos rabinos son mentirosos?” Ellas comenzarán a discutir, palabras fuertes darán lugar a palabras aún más fuertes y la dueña del restaurante se enojará tanto que terminará despidiendo a la pobre cocinera.
En consecuencia la mujer se quedará sin trabajo y sin ingresos. Mire cuántas transgresiones ha provocado: (1) Usted habló lashón hará; (2) provocó que la dueña del restaurante y yo escucháramos lashón hará; (3) provocó que la dueña repitiera las palabras de lashón hará y eso constituye el pecado de rejilut; (4) provocó que la cocinera mintiera; (5) por su culpa la propietaria del restaurante provocó dolor a una viuda, y (6) provocó una pelea, lo cual es otra violación a la Torá.
El Rab le sonrió al Jafetz Jaim y le dijo suave y respetuosamente:
– Rab Israel Meir, por favor, está exagerando. Unas simples palabras no pueden provocar tanto daño.
– Si eso es lo que usted piensa, vayamos a la cocina para comprobarlo por nosotros mismos – le dijo el Jafetz Jaim poniéndose de pie.
Al abrir la puerta de la cocina vieron que efectivamente la dueña del restaurante estaba reprendiendo a la cocinera y que la pobre mujer secaba las lágrimas de sus ojos. Cuando el Rabino vio lo que estaba ocurriendo empalideció y corrió hacia la cocinera, pidiéndole perdón y disculpándose por cualquier daño o dolor que le hubiera provocado. También le suplicó a la propietaria que lo perdonara y que olvidara todo el incidente y que le permitiera a la mujer seguir trabajando. Incluso le ofreció pagarle para que no despidiera a la cocinera.
La propietaria era una mujer muy buena y ella también deseaba cumplir con el pedido del rabino.
– Por supuesto, por supuesto -le dijo enseguida-. Mi única intención era que ella comprendiera que debe ser más cuidadosa. Ella es una buena cocinera y continuará trabajando aquí. (Rab Pesaj Krohn, The Maggid Speaks, página 59).
¡Imagina qué hubiera sucedido si el Rabino hubiese alabado a la cocinera por su sopa!
Piensa qué hubiera pasado si él hubiese dicho: “¡Por favor, agradézcale a la cocinera por la mejor sopa que comí durante toda la semana!”.
Ese es el poder que tienen nuestras palabras para construir o para destruir. En el siguiente apartado analizaremos más profundamente el poder de la palabra en las Escrituras…
- Lashón hará en las Escrituras:
Salmos 34:13-14 – “¿Quién es el hombre que desea la vida, que ama los días para ver el bien? Cuida tu lengua del mal y tus labios de hablar engaño”
Proverbios 21:23 – “Aquel que cuida su boca y su lengua, cuida su alma de problemas”
Proverbios 18:21 – «La muerte y la vida están en poder de la lengua, Y el que la ama comerá de sus frutos»
Podemos ver claramente en el primer texto que leímos la necesidad que todos tenemos de aprender a cuidar nuestra lengua, «en mi entender» dicho texto nos advierte de las maldiciones que se activan por medio de los demonios de lashon hara «lengua maligna» y viene a morar en nuestra alma; en unión con el texto de Proverbio 18:21 «La muerte y la vida están bajo el poder de la lengua« y de 1 Pedro 3:10; «Porque: El que quiere amar la vida y ver días buenos, Refrene su lengua del mal y sus labios no hablen engaño».
Santiago 3:5 – «Y la lengua es un fuego, un mundo de maldad. La lengua está puesta entre nuestros miembros, y contamina todo el cuerpo, e inflama la rueda de la creación, y ella misma es inflamada por el infierno».
Todos estos pasajes nos muestran la necesidad de refrenar nuestras lenguas ya que si nos dejamos llevar por la influencia demoníaca de maldecir automáticamente se activan en medio de nosotros una maldición demoniaca.
El tema que nos ocupa es largo y deja una enseñanza sobre el caminar en nuestra vidas.
¿Sabias que el hablar mal hace que violemos 31 mandamientos de la Torah? – (17 de ellos son negativos y 14 positivos)
Pues bien observemos los siguiente.
Levítico 19:16 «No vayas por ahí esparciendo calumnias entre tu pueblo«. Algunas versiones de dicen no vayas chismeando.
Éxodo 23:1 «No repetirás falsos rumores; no unas tus manos con el perverso ofreciendo testimonio injusto»
Deuteronomio 24:8 – «En cuanto a la plaga de la lepra, ten cuidado de observar diligentemente y hacer según todo lo que os enseñaren los sacerdotes levitas; según yo les he mandado, así cuidaréis de hacer»
Es de recordar que la plaga de lepra fue producida por la lengua mala, esto ocurrió a Maria después de haber salido de Egipto, si nosotros dejamos la esclavitud y estamos recorriendo el camino a la tierra prometida no es consciente que nos vaya ha ocurrir algo similar.
Este mandamiento es similar al no maldecir al sordo…
Deuteronomio 8:11 – «Cuídate de no olvidarte de YHVH tu Dios, para cumplir sus mandamientos, sus decretos y sus estatutos que yo te ordeno hoy»
Cuando hablamos Lashón hará, nos olvidamos que el Eterno está presente y arremetemos en contra de otro.
Levítico 22:32 – «Y no profanéis mi santo nombre, para que yo sea santificado en medio de los hijos de Israel. Yo YHVH que os santifico»
El Eterno muestra que Él es quien nos santifica, es decir que entre más conocimiento tenemos mayor es la profanación a su nombre, me recuerda aquel mandamiento que dice «…El que sabe hacer lo bueno y no lo hace, le es pecado…tremenda cosa es caer en manos del Dios vivo»
Levítico 19:17-18 – «No aborrecerás a tu hermano en tu corazón; razonarás con tu prójimo, para que no participes de su pecado. (18) No te vengarás, ni guardarás rencor a los hijos de tu pueblo, sino amarás a tu prójimo como a ti mismo. Yo YHVH»
Generalmente la persona que habla mal ó practica Lashón hará no ama y odia en su corazón; cuando a Jesús le preguntaron cual era el más grande mandamiento el dijo:
Marcos 12:29-31 – «Jesús le respondió: El primer mandamiento de todos es: Oye, Israel; el Señor nuestro Dios, el Señor uno es. (30) Y amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con toda tu mente y con todas tus fuerzas. Este es el principal mandamiento. (31) Y el segundo es semejante: Amarás a tu prójimo como a ti mismo. No hay otro mandamiento mayor que éstos»
Éxodo 23:2 – «No seguirás a los muchos para hacer mal, ni responderás en litigio inclinándote a los más para hacer agravios»
Cuantas veces hemos hablado de grupos religiosos, grupos políticos, países y otros en pro de la injusticia, recordemos que AUN CUANDO FUERE VERDAD el testimonio se constituye en lengua maligna -Lashón hará-, no podemos hacer juicio, esto corresponde estrictamente a el Señor.
En estos días de conflicto en que vivimos abstengámonos de hablar…pongamos freno a este pequeño miembro y oremos más bien por la paz del cuerpo del Mesías y por la paz de Jerusalem
Proverbios 21:23 – «El que guarda su boca y su lengua, Su alma guarda de angustias»
No requiere explicación basta con corregirnos, pues la lengua mala ha generado conflictos en diferentes lugares del mundo. Cualquiera que guarde su boca y lengua mantiene su alma fuera de problemas.
Levítico 25:17 – «Y no engañe ninguno a su prójimo, sino temed a vuestro Dios; porque yo soy YHVH vuestro Dios»
No sobra decir que este mandamiento, es similar a la hipocresía de los hombres, cuando hablamos de forma falsa y produce daño a una persona se transgrede en un grado superior.
Aléjate de la persona que habla mal, escuchar también te constituye en transgresor.
Éxodo 22:21 –«Y al extranjero no engañarás ni angustiarás, porque extranjeros fuisteis vosotros en la tierra de Egipto»
Según el judaísmo es una transgresión por separado Lashón hará, que al multiplicarla cada palabra cobra un valor, fíjate diariamente cuanto decimos…Sabias que por Lashón hará se apartó la Shekina del Eterno.
Números 35:33 –«Y no contaminaréis la tierra donde estuviereis; porque esta sangre amancillará la tierra, y la tierra no será expiada de la sangre que fue derramada en ella, sino por la sangre del que la derramó»
Nos prohíbe alabar a un transgresor, cuando aprobamos las palabras de estas personas.
Deuteronomio 24:9 – «Acuérdate de lo que hizo YHVH tu Dios a María en el camino, después que salisteis de Egipto»
Las enfermedades generalmente vienen por causa de nuestra lengua, recuerdas… Inflama la rueda de nuestra de vida.
Levítico 19:15 – «No harás injusticia en el juicio, ni favoreciendo al pobre ni complaciendo al grande; con justicia juzgarás a tu prójimo»
Levítico 19:18 – «No te vengarás, ni guardarás rencor a los hijos de tu pueblo, sino amarás a tu prójimo como a ti mismo. Yo YHVH»
Sabias que es una de las reglas de oro consignadas en la palabra, a veces hablamos mal HASTA DE NOSOTROS MISMOS, si es cierto cuando hablas mal hablas de ti mismo.
Levítico 25:35 – «Y cuando tu hermano empobreciere y se acogiere a ti, tú lo ampararás; como forastero y extranjero vivirá contigo»
Si hablamos de una persona y como consecuencia la persona pierde un negocio, su trabajo, la oportunidad de vender algo esto es consecuencia de Lashón hará, es pecado avergonzar a una persona.
Levítico 19:17 – «No aborrecerás a tu hermano en tu corazón; razonarás con tu prójimo, para que no participes de su pecado»
Si en vez de poner freno a la habladuría yo escucho, estoy violando el mandamiento, cada palabra es un pecado adicional.
Deuteronomio 10:20 – «A YHVH tu Dios temerás, a él solo servirás, a él seguirás, y por su nombre jurarás»
Levítico 19:32 – «Delante de las canas te levantarás, y honrarás el rostro del anciano, y de tu Dios tendrás temor. Yo YHVH»
Debemos Honrar a un sabio de la Palabra o anciano aunque no sea mayor de edad y honrar a un anciano aunque no sea sabio de la Palabra, gran enseñanza.
Levítico 21:8 – «Le santificarás, por tanto, pues el pan de tu Dios ofrece; santo será para ti, porque santo soy yo YHVH que os santifico»
Nos obliga a tener respeto por los sacerdotes.
Éxodo 20:12 – «Honra a tu padre y a tu madre, para que tus días se alarguen en la tierra que YHVH tu Dios te da»
El que habla sobre sus padres ó hermanos es Lashón hará. Cuando hablamos mal de un hermano estamos dejando de temer a Dios, hay que tener cuidado con los juicios que hacemos Deuteronomio 10.20.
Deuteronomio 6:7 – «y las enseñarás cuidadosamente a tus hijos. Hablarán de ellas cuando se sienten en su casa, cuando viajen en el camino, cuando se acuesten y cuando se levanten»
Éxodo 23:7 – «Mantente alejado del fraude, y no causes la muerte del inocente y justo; porque Yo no justificaré al perverso»
Cuando hablas mal matas al inocente, porque no te escucha y no te ve… Recuerdas No maldecirás al Sordo. Aquí podemos aplicar este principio.
Deuteronomio 28:9 – «Te confirmará YHVH por pueblo santo suyo, como te lo ha jurado, cuando guardares los mandamientos de YHVH tu Dios, y anduvieres en sus caminos»
Debemos imitar los atributos del Señor.
Lashon hara (לשון הרע ) fue pensado originalmente como un decreto contra el chisme. Se basa en Levítico 19:15 y 16 y nos dice que no debemos tener cuentos o tomar una posición en contra de la vida de nuestro prójimo.
Levitico 19:16 – «No andarás chismeando entre tu pueblo. No atentarás contra la vida de tu prójimo. Yo soy YHVH»
Además, el noveno mandamiento nos dice que no darás falso testimonio contra nuestro prójimo.
Éxodo 20:16 – «No hablarás contra tu prójimo falso testimonio»
Esta catalogado como uno de los Diez Mandamientos, y nos muestra con qué fuerza se siente acerca de YHVH testigos falsos. Sin embargo lashon hara va más allá: Nos dice que ni siquiera deberíamos hablar despectivamente contra nuestros vecinos. Esta idea se deriva de cómo María fue castigada por hablar despectivamente contra Moisés.
Números 12:1-2 – «María y Aarón hablaron contra Moisés a causa de la mujer cusita que había tomado; porque él había tomado mujer cusita. (2) Y dijeron: ¿Solamente por Moisés ha hablado YHVH? ¿No ha hablado también por nosotros? Y lo oyó YHVH»
Lo que dijo Maria era esencialmente cierto: YHVH no había hablado sólo mediante Moisés, sino que también había hablado a través de otros miembros de la congregación de Israel. Sin embargo, como el discurso de Maria no era constructivo, pero despectivo y divisiva, YHVH lo consideró “malo”.
Mientras tanto Maria y Aharon estuvieron presentes, Maria se menciona por primera vez en la narración. Dado que Maria fue la castigada, algunos estudiosos creen que ella fue quien inició la calumnia. En cualquier caso, el castigo de Maria por hablar contra el líder terrenal de la nación de Israel iba ser afectado con tzaraas (“leprocia”) durante siete días.
Números 12:9-11 – «(9) Entonces la ira de YHVH se encendió contra ellos; y se fue. (10) Y la nube se apartó del tabernáculo, y he aquí que María estaba leprosa como la nieve; y miró Aarón a María, y he aquí que estaba leprosa. (11) Y dijo Aarón a Moisés: !!Ah! Señor mío, no pongas ahora sobre nosotros este pecado; porque locamente hemos actuado, y hemos pecado»
La creencia del judaísmo respecto a este tema enseña que toda comunicación es casi siempre “mala” si cumple con los siguientes cuatro criterios:
- Se dice algo negativo acerca de una persona o partido.
- Es algo previamente no conocida por el público.
- No se ve seriamente diseñado para corregir o mejorar una situación negativa.
- Es cierto.
Si los cuatro de estos criterios se cumplen, la comunicación es casi seguro es lashon hara.
Sin embargo, el judaísmo también enseña una estipulación quinta que dicha comunicación puede incluso ser obligatorio si se es consciente de la posibilidad de daños en el futuro próximo a otra persona.
En esos casos, uno está éticamente obligado a avisar a la otra persona, para que no vengan a perjudicar. Como veremos, esta es la clave para entender cómo la doctrina de lashon hara aplica al Pacto Renovado (Nuevo Testamento).
El judaísmo tradicional considera lashon hara ser uno de los más graves de todos los pecados. El judaísmo tradicional también nos dice que no debemos confundir lashon hara con motzei shem ra (calumnia pura), hablando de lo burlones cuyas afirmaciones no son ciertas.
Algunos académicos creyentes cuestionan si la doctrina de lashon hara es correcta, o si se aplica en un contexto Pacto Renovado. Estos expertos señalan que si los cuatro (o cinco) se aplican en su sentido más estricto, el apóstol Pablo, Jesús, y tal vez incluso YHVH podría ser condenado por hablar “mal”. Sin embargo, mientras que ninguno de los apóstoles eran perfectos, sabemos que Jesús y YHVH son perfectos, así que echemos un vistazo a estos casos con más detalle.
2ª Timoteo 4:14-16 – «(14) Alejandro el calderero me ha causado muchos males; que YHVH le pague conforme a sus hechos. (15) Guárdate tú también de él, pues en gran manera se ha opuesto a nuestras palabras. (16) En mi primera defensa ninguno estuvo a mi lado, sino que todos me desampararon; no les sea tomado en cuenta»
En sus escrituras, el apóstol Pablo menciona nombres. Algunos comentaristas sugieren que la única manera que Pablo pudo hablar legítimamente en contra de Alexander fuera si un beit din (tribunal) juzgo en contra de Alexander, a favor de Pablo. Estos nos dicen que entonces (y sólo entonces) Pablo seria justificado en términos de afirmación verdadera que fue negativa hacia Alexander.
Mientras el bien del contexto de este pasaje parece tener en cuenta la posibilidad de que hubo una audiencia en la corte, esto no ha sido comprobado. También parece razonable que la única razón por lo cual Pablo podía permitir comunicar la verdad a Timoteo fue que un tribunal había dictaminado previamente en favor de Pablo.
El propósito de Pablo para escribir a Timoteo fue claramente para advertirle (y aquellos a los que sirvió de guía) que vienen a perjudicar. Esto está claramente en consonancia con la estipulación quinta, que el hablante está éticamente obligado a transmitir la información que cree que podría salvar a otros de venir a perjudicar.
Los rabinos podría considerar esta declaración de Jesús ser lashon hara.
Mateo 15:13-14 – «(13) Pero respondiendo él, dijo: Toda planta que no plantó Mi Padre celestial, será desarraigada. (14) Dejadlos; son ciegos guías de ciegos; y si el ciego guiare al ciego, ambos caerán en el hoyo»
De acuerdo con las estrictas reglas de interpretación, los comentarios de Jesús podrían ser considerado lashon hara porque:
- Él dice algo negativo acerca de una persona o Partido.
- Él está diciendo algo antes no conocidos por el público.
- Él no está dirigiendo, Su intento es de corregir el comportamiento del rabino hacia ellos.
- Sus declaraciones son (por definición) correcta.
Sin embargo, la estipulación quinta también entra en juego aquí. Jesús está tratando de advertir a sus discípulos no ser como los escribas o fariseos, a fin de evitar un juicio en el futuro (es decir, evitar un daño).
La razón de que Jesús habla de manera penetrante puede ser el fin de remachar el clavo de una manera que se pegue, por lo tanto, las observaciones de Jesús no califica como lashon hara.
Aquí hay otra declaración de Jesús que el judaísmo tradicional probablemente clasificaría como lashon hara.
Juan 8:44-47 – » (44) Vosotros sois de vuestro padre el diablo, y los deseos de vuestro padre queréis hacer. El ha sido homicida desde el principio, y no ha permanecido en la verdad, porque no hay verdad en él. Cuando habla mentira, de suyo habla; porque es mentiroso, y padre de mentira. (45) Y a Mí, porque digo la verdad, no Me creéis. (46) ¿Quién de vosotros Me redarguye de pecado? Pues si digo la verdad, ¿por qué vosotros no Me creéis? (47) El que es de Elohim, las palabras de Elohim oye; por esto no las oís vosotros, porque
Nota que:
- Jesús dice algo negativo acerca de una persona o partido.
- Él está diciendo algo que antes no es conocido por el público (es decir, no es conocimiento común)
- Sus declaraciones son (por definición) correctas.
- Él dirige Su intento de corregir o mejorar el comportamiento del rabino hacia ellos.
En lugar de guardar rencores secretos, el judaísmo espera que la gente hable de lo que es correcto. Esta ética nacional de “limpiar el aire” puede derivar de Levítico 19:17 y 18, que nos ordena “seguramente” reprender a nuestros vecinos, para no guardar pecado (o sea, no mantener rencores) a causa de ellos.
Levítico 19:17-18 – «(17) No aborrecerás a tu hermano en tu corazón; razonarás con tu prójimo, para que no participes de su pecado. (18) No te vengarás, ni guardarás rencor a los hijos de tu pueblo, sino amarás a tu prójimo como a ti mismo. Yo soy YHVH»
(17) לֹא תִשְׂנָא אֶת אָחִיךָ בִּלְבָבֶךָ | הוֹכֵחַ תּוֹכִיחַ אֶת עֲמִיתֶךָ וְלֹא תִשָּׂא עָלָיו חֵטְא:
(18) לֹא תִקֹּם וְלֹא תִטֹּר אֶת בְּנֵי עַמֶּךָ וְאָהַבְתָּ לְרֵעֲךָ כָּמוֹךָ | אֲנִי יְהוָה
Este pasaje es especialmente revelador para los occidentales, ya que la versión del Rey Santiago (la biblia KJV) nos da una interpretación equivocada de este pasaje, y este legado sigue vivo en el pensamiento occidental y de los códigos de ética.
La traducción en la versión Rey Santiago (la biblia KJV) parece sugerir que nunca debemos reprender a nuestro prójimo, porque eso sería “pecado encima de el.” Sin embargo, esta lectura es lo contrario de lo que el hebreo realmente dice.
En hebreo, el mandamiento es “seguro” reprender al prójimo, basada en la duplicación de la raíz de la palabra yakach (הוֹכֵחַתּוֹכִיחַ ). Siempre cuando una palabra que la raíz se duplica o se repite, se convierte en un imperativo.
El hebreo de este pasaje también es interesante analizar en el contexto de la lógica de bloque hebreo. Logica de Bloque nos dice que cuando YHVH pone lo que parece como pensamientos dispares (como en Levítico 19:17 y 18), estos pensamientos están relacionados entre sí, aunque la conexión no es fácil para el lector casualmente identificar. Cuando aplicamos la lógica de bloque a Levítico 19:17 y 18, parece que el significado de YHWH es:
para amar verdaderamente a nuestro prójimo como a nosotros mismos, tenemos que “seguramente” reprender a nuestros vecinos, para que puedan aprender y mejorar.
Si no los reprende, ¿cómo van a aprender lo que está mal, y si no saben que algo está mal, ¿cómo van a mejorar? Además, si la otra parte nos oye o no, una vez que hemos “sacado las cosas fuera de nuestro pecho” y hemos “limpiado el aire” no es necesario “guardar el pecado”.
Lógica de Bloque parece indicar que si amamos a alguien, vamos hacer lo que podamos para ayudarles a mejorar, y esto parece ser exactamente lo que Jesús estaba haciendo en Juan 8:44-47 (arriba). Por “cierto” reprendió a los fariseos, Jesús fue testigo a ellos, El había hecho su parte para darles la opción de cambiar.
YHVH habla de la importancia de esta misma clase de testimonio a través de Su profeta Ezequiel. Al hablar la verdad en amor, nosotros entregamos nuestras propias almas.
Ezequiel 3:17-19 – «(17) Hijo de hombre, yo te he puesto por atalaya a la casa de Israel; oirás, pues, tú la palabra de Mi boca, y los amonestarás de Mi parte. (18) Cuando yo dijere al impío: De cierto morirás; y tú no le amonestares ni le hablares, para que el impío sea apercibido de su mal camino a fin de que viva, el impío morirá por su maldad, pero su sangre demandaré de tu mano. (19) Pero si tú amonestares al impío, y él no se convirtiere de su impiedad y de su mal camino, él morirá por su maldad, pero tú habrás librado tu alma»
La clave aquí, sin embargo, es hablar la verdad en amor verdadero y sincero, en lugar de la ira, condena, sentencia o cualquier otra emoción.
Mientras que YHVH nos invita a ponerse de pie y hablar a favor de lo que está bien, siempre debemos recordar que la meta no es criticar, censurar o juzgar a nadie. Más bien, debemos tener muy presente que el objetivo es el cuerpo de Mesías para aprender a edificar a sí mismo en el amor.
Efesios 4:11-16 – «(11) Y El mismo constituyó a unos, apóstoles; a otros, profetas; a otros, evangelistas; a otros, pastores y maestros, (12) a fin de perfeccionar a los santos para la obra del ministerio, para la edificación del cuerpo de Mesías, (13) hasta que todos lleguemos a la unidad de la fe y del conocimiento del Hijo de Elohim, a un varón perfecto, a la medida de la estatura de la plenitud de Mesías; (14) para que ya no seamos niños fluctuantes, llevados por doquiera de todo viento de doctrina, por estratagema de hombres que para engañar emplean con astucia las artimañas del error, (15) sino que siguiendo la verdad en amor, crezcamos en todo en aquel que es la cabeza, esto es, Mesías, (16) de quien todo el cuerpo, bien concertado y unido entre sí por todas las coyunturas que se ayudan mutuamente, según la actividad propia de cada miembro, recibe su crecimiento para ir edificándose en amor»
Para que no subestimar la importancia de ayudar al cuerpo a aprender a edificar en sí en el amor, vamos a considerar las instrucciones de Jesús en Mateo 5:21-26, donde se nos dice que si hemos hecho algo para ofender a nuestros hermanos, o si no perdonan y no reconcilia con ellos, YHWH no acepta nuestras ofrendas.
Mateo 5:21-26 – «(21) Oísteis que fue dicho a los antiguos: No matarás; y cualquiera que matare será culpable de juicio. (22) Pero Yo os digo que cualquiera que se enoje contra su hermano, será culpable de juicio; y cualquiera que diga: Necio, (te escupo!) a su hermano, será culpable ante el concilio; y cualquiera que le diga: Fatuo, quedará expuesto al infierno de fuego. (23) Por tanto, si traes tu ofrenda al altar, y allí te acuerdas de que tu hermano tiene algo contra ti, (24) deja allí tu ofrenda delante del altar, y anda, reconcíliate primero con tu hermano, y entonces ven y presenta tu ofrenda. (25) Ponte de acuerdo con tu adversario pronto, entre tanto que estás con él en el camino, no sea que el adversario te entregue al juez, y el juez al alguacil, y seas echado en la cárcel. (26) De cierto Te digo que no saldrás de allí, hasta que pagues el último cuadrante»
La ira, la hostilidad, o las emociones calientes cuando uno reprende son exactamente lo contrario del comportamiento apacible y tranquilo que YHVH quiere que desarrollemos.
Para complacer a YHVH, nuestros reproches a un hermano deben ser con amor ayudando resolver sus problemas.
Gálatas 6:1-5 – «(1) Hermanos, si alguno fuere sorprendido en alguna falta, vosotros que sois espirituales, restauradle con espíritu de mansedumbre, considerándote a ti mismo, no sea que tú también seas tentado. (29 Sobrellevad los unos las cargas de los otros, y cumplid así la ley de Cristo. (3) Porque el que se cree ser algo, no siendo nada, a sí mismo se engaña. (4) Así que, cada uno someta a prueba su propia obra, y entonces tendrá motivo de gloriarse sólo respecto de sí mismo, y no en otro; (5) porque cada uno llevará su propia carga»
Si de verdad amamos a nuestros hermanos y esperamos poder ayudar como nos gustaría ser ayudado, nuestro reproche debe ser entregado en la bondad y sin ira, porque la ira del hombre no obra la clase de afecto fraternal que Dios desea.
Santiago 1:19-20 – «(19) Por esto, mis amados hermanos, todo hombre sea pronto para oír, tardo para hablar, tardo para airarse; (20) porque la ira del hombre no obra la justicia de Dios»
Para centrarse en el bien es escoger la vida, lo que nos ayudará en todos los aspectos de la vida, especialmente cuando se aplica a nuestra comunicación con los demás. Santiago nos muestra la importancia de hablar con suavidad y de forma pacífica, se centra en hablar solamente el bien.
Santiago 3:1-13 – «(1) Hermanos míos, no os hagáis maestros muchos de vosotros, sabiendo que recibiremos mayor condenación. (2) Porque todos ofendemos muchas veces. Si alguno no ofende en palabra, éste es varón perfecto, capaz también de refrenar todo el cuerpo. (3) He aquí nosotros ponemos freno en la boca de los caballos para que nos obedezcan, y dirigimos así todo su cuerpo. (4) Mirad también las naves; aunque tan grandes, y llevadas de impetuosos vientos, son gobernadas con un muy pequeño timón por donde el que las gobierna quiere. (5) Así también la lengua es un miembro pequeño, pero se jacta de grandes cosas. He aquí, ¡cuán grande bosque enciende un pequeño fuego! (6) Y la lengua es un fuego, un mundo de maldad. La lengua está puesta entre nuestros miembros, y contamina todo el cuerpo, e inflama la rueda de la creación, y ella misma es inflamada por el infierno. (7) Porque toda naturaleza de bestias, y de aves, y de serpientes, y de seres del mar, se doma y ha sido domada por la naturaleza humana; (8) pero ningún hombre puede domar la lengua, que es un mal que no puede ser refrenado, llena de veneno mortal. (9) Con ella bendecimos al Dios y Padre, y con ella maldecimos a los hombres, que están hechos a la semejanza de Dios. (10) De una misma boca proceden bendición y maldición. Hermanos míos, esto no debe ser así. (11) ¿Acaso alguna fuente echa por una misma abertura agua dulce y amarga? (12) Hermanos míos, ¿puede acaso la higuera producir aceitunas, o la vid higos? Así también ninguna fuente puede dar agua salada y dulce.(13) ¿Quién es sabio y entendido entre vosotros? Muestre por la buena conducta sus obras en sabia mansedumbre»
Mateo 12:35-37 – «(35) El hombre bueno, del buen tesoro del corazón saca buenas cosas; y el hombre malo, del mal tesoro saca malas cosas. (36) Mas yo os digo que de toda palabra ociosa que hablen los hombres, de ella darán cuenta en el día del juicio. (37) Porque por tus palabras serás justificado, y por tus palabras serás condenado»
Las cosas que salen de nuestras bocas indican lo que hay en nuestros corazones.
YHVH nos muestra que para amar verdaderamente a nuestro hermano y ayudarlo a mejorar, tenemos que poner nuestras emociones a un lado y hablar con él en el amor, tal como esperarias a ti mismo que te hablaran.
Mateo 7:12 –«(12) Así que, todas las cosas que queráis que los hombres hagan con vosotros, así también haced vosotros con ellos; porque esto es la ley y los profetas»
Es muy difícil cuando la persona que estamos hablando no escucha nuestras palabras.
Requiere tener una verdadera paciencia para recordar que Dios sólo puede condenar, sobre todo si el tema es “caliente” para nosotros, y ha causado ya sea en nosotros o nuestros seres queridos tropiezo en el pasado, o está activamente haciendo daño a nuestros seres queridos.
Una vez que hemos hecho nuestro mejor trabajo de entregar el mensaje con amor, hay que dejar de lado el resultado y dejárselo en manos de Dios.
Romanos 14:4 – «(4) ¿Tú quién eres, que juzgas al criado ajeno? Para su propio señor está en pie, o cae; pero estará firme, porque poderoso es Dios para hacerle estar firme»
En efecto, debemos ser extremadamente cautelosos cuando algo “empuja nuestros botones calientes”, por lo que indica que es posible que tengamos una falla similar o relacionada.
Romanos 2:1 – «Por lo cual eres inexcusable, oh hombre, quien quiera que seas tú que juzgas; pues en lo que juzgas a otro, te condenas a ti mismo; porque tú que juzgas haces lo mismo»
Cuando nos encontramos enojados o perturbados emocionalmente, tenemos que parar y recordar que no somos más que mensajeros de Dios. Nuestro mensaje debe ser entregado con toda mansedumbre y bondad, si es tener el máximo efecto, y debemos estar seguros de que no hablamos mal de nuestro hermano.
Santiago 4:11-12 – «(11) Hermanos, no murmuréis los unos de los otros. El que murmura del hermano y juzga a su hermano, murmura de la ley y juzga a la ley; pero si tú juzgas a la ley, no eres hacedor de la ley, sino juez. (12) Uno solo es el dador de la ley, que puede salvar y perder; pero tú, ¿quién eres para que juzgues a otro?»
Como dice el proverbio de nuestros padres: “Un hombre convencido contra su voluntad, es un hombre aún de la misma opinión, y una mujer aún más” Uno de los más grandes de todos los pecados es pensar que estamos sin pecado, por lo que si nuestro hermano no escucha nuestra reprensión, en vez de llegar a juicio, tenemos que postrarnos de cara y orar por nuestro hermano, a quien amamos.
Considere la posibilidad de la justicia de David.
Salmos 35:11-14 – «(11) Se levantan testigos malvados; De lo que no sé me preguntan; (12) Me devuelven mal por bien, Para afligir a mi alma. (13) Pero yo, cuando ellos enfermaron, me vestí de cilicio; Afligí con ayuno mi alma, Y mi oración se volvía a mi seno. (14) Como por mi compañero, como por mi hermano andaba; Como el que trae luto por madre, enlutado me humillaba»
David también es un modelo de como refrenar su lengua de no decir nada malo en absoluto, aun cuando sus situaciones eran difíciles dentro de el.
Salmos 39:1-3 – «(1) Yo dije: Atenderé a mis caminos, Para no pecar con mi lengua;
Guardaré mi boca con freno, En tanto que el impío esté delante de mí. (2) Enmudecí con silencio, me callé aun respecto de lo bueno; Y se agravó mi dolor. (3) Se enardeció mi corazón dentro de mí; En mi meditación se encendió fuego, Y así proferí (despues) con mi lengua»
Puede ser un verdadero reto para nosotros el mantener nuestra lengua, aun cuando nos provocan.
Considere la posibilidad de poder ilimitado de YHWH sobre el universo. Cualquier medida que usamos al formar nuestras opiniones de otros, esta es la medida que YHWH usará cuando Él nos va juzgar. Por lo tanto, sin ser tonto, si somos misericordiosos y de caridad, al formar nuestras opiniones de los demás, YHWH será misericordioso y caritativo cuando se forma su opinión sobre nosotros.
Santiago 2:12-13 – «Así hablad, y así haced, como los que habéis de ser juzgados por la ley de la libertad. (13) Porque juicio sin misericordia se hará con aquel que no hiciere misericordia; y la misericordia triunfa sobre el juicio»
¿De qué manera misericordia triunfa sobre el juicio?
Si somos capaces de detectar los defectos en los demás…¿Creemos que somos completamente libre de pecado?, ¿Creemos que nuestras acciones del día a día son totalmente justas?, ¿Estamos dispuestos a admitir que tal vez podríamos tener fallos o de que somos ciegos?
Y si es así, entonces es posible que otros tambien sean ciegos a algunos de sus defectos, y sólo es YHVH que tiene el poder para condenar.
La doctrina de lashon hara nos da patrones concretos de cómo comportarse. Podemos modelarlo a nuestros hermanos, de modo que incluso en el calor del momento, vamos a trabajar en nuestra salvación con temor y temblor.
Mateo 5:48 – «Sed, pues, vosotros perfectos, como vuestro Padre que está en los cielos es perfecto»
Preguntase ahora mismo: ¿Usted habitará en el tabernáculo de YHVH?
Salmos 15:1-5 ” YHVH, ¿quién habitará en tu tabernáculo? ¿Quién morará en tu monte santo? El que anda en integridad y hace justicia, y habla verdad en su corazón. El que no calumnia con su lengua, ni hace mal a su prójimo, Ni admite reproche alguno contra su vecino. Aquel a cuyos ojos el vil es menospreciado, pero honra a los que temen a YHVH. El que aun jurando en daño suyo, no por eso cambia; Quien su dinero no dio a usura, Ni contra el inocente admitió cohecho. El que hace estas cosas, no resbalará jamás“
Si esta cometiendo o piensa en cometer Lashon Hara, PARE. Recuerde el Creador del universo lo esta viendo y lo abominará, y el peso de su justicia caerá sobre usted y los suyos. Y es tan culpable el que lo dice, como el que lo oye y divulga.
7 Cosas que YHVH odia:
Proverbios 6:16-17 “Seis cosas aborrece YHVH, Y aun siete abomina su alma:
Los ojos altivos, la lengua mentirosa, Las manos derramadoras de sangre inocente,
El corazón que maquina pensamientos inicuos, Los pies presurosos para correr al mal,
El testigo falso que habla mentiras, Y el que siembra discordia entre hermanos“
Medite sobre esto: Tres de estos 7 pecados mas odiados por YHVH de los tantos miles y miles de pecados son referentes a la lengua.
Maldiciones que recaen sobre aquel que habla mal -Lashón Hará-
Deuteronomio 27:16 – «Maldito quien desprecie a su padre o a su madre. – Y todo el pueblo dirá: Amén»
Deuteronomio 27:18 – «Maldito quien desvíe a un ciego en el camino. – Y todo el pueblo dirá: Amén»
Deuteronomio 27:24 – «Maldito el que hiriere a su prójimo ocultamente. Y dirá todo el pueblo: Amén»
Deuteronomio 27:26 – «Maldito quien no mantenga las palabras de esta ley, poniéndolas en práctica. – y todo el pueblo dirá: amén»
No sobra decir como lo comente en el texto anterior que aquel que habla de forma oculta contra su prójimo esta haciendo errar al oyente y maldice a la persona que no esta presente convirtiéndola en ciega porque no te ve cuando lo haces y sorda porque no te escucha…
Pero… Nuestro Señor si te oye y si te ve, tengamos temor de su justo juicio y no traigamos maldición a nuestros hogares.
- ¿Porque es tan terrible?:
¿Por qué es tan terrible contar un pequeño chisme?
De todas maneras estos forman parte de nuestro mundo –están en la televisión, en los periódicos, en Internet. De hecho, ¡es tan emocionante ser el primero de la cuadra que revela las sensacionales noticias sobre fulano!
¿Por qué se lo debe considerar algo malvado?
Si algo es cierto y finalmente de alguna manera todo el mundo se enterará, ¿Cuál es el problema de contarlo? ¡Son solamente unas pocas palabras! ¿O no? Las siguientes fuentes responderán a estas preguntas.
1. Lashón hará contradice El plan de la creación :
a) Respecto a alguien que habla lashón hará, Dios dice: “Él y Yo no podemos coexistir en el mismo mundo”. El versículo dice: “A aquél que calumnia a su amigo en secreto… Yo no lo puedo soportar” [Salmo 101:5]. No leas “Yo no lo puedo soportar [lo cual en hebreo se pronuncia ujal],” sino más bien “Yo no lo puedo comer [lo cual en hebreo se pronuncia ojel]”.
La siguiente fuente explica el significado completo que se oculta detrás de la afirmación anterior.
b) A pesar de que las personas tenemos defectos, Dios ve lo bueno de cada uno:
Dios ve lo bueno de cada uno y El nos ayuda a alcanzar nuestra propia perfección personal. Por otra parte, alguien que habla lashón hará enfatiza los defectos de las personas e ignora lo bueno que tienen; y esto contradice el plan de Dios para la humanidad.
El significado de la afirmación en la fuente anterior es que el mundo de aquél que habla lashón hará es una contradicción con el mundo que Dios ha creado.
La explicación es: Es un axioma que el mundo es imperfecto y tiene defectos. La manera en la cual Dios guía los eventos del mundo es para llevarlo hacia su perfeccionamiento. Esto también se aplica a nivel de cada individuo. Cada persona tiene imperfecciones y defectos, pero Dios, en Su gran misericordia ve el bien que se encuentra dentro de cada uno como su verdadera esencia y lo ayuda a lograr la propia perfección personal.
Bajo esta perspectiva no queda lugar para categorizar a alguien como en falta debido a sus defectos, porque -al final de cuentas- esa persona se encuentra camino a su perfeccionamiento…
Quien habitualmente habla lashón hará enfatiza los aspectos negativos de los demás, y al hacerlo le da a esas debilidades una realidad y una permanencia. Al hacerlo, se aleja a sí mismo del mundo que Dios ha creado, un mundo entero que se mueve hacia la perfección.
2. El daño espiritual y físico que provoca Lashón hará:
Para entender el daño que causa el lashón hará, la siguiente fuente nos provee información respecto a la manera en la cual nuestros actos son juzgados y sopesados en el reino Celestial.
a) El rey David nos aconseja: si deseas la vida, cuida tu lengua de hablar mal de los demás. – Salmos 34:13-14.
Los comentarios explican que la frase: “que desea la vida” se re ere a la vida eterna en el Mundo Venidero. Y la frase “que quiere muchos días de ver el bien” se re ere a este mundo, el cual se trata solamente de unos pocos días en comparación con la vida eterna.
Desconcierta el hecho de que el versículo nos aconseje evitar este pecado específico de hablar negativamente.Después de todo, hay otros 248 mandamientos positivos y 365 mandamientos negativos.
¿Por qué el versículo enfatiza esta transgresión en particular?
b)En la lengua está el poder de la vida o la muerte. las palabras negativas pueden en última instancia llevar a la muerte de otras personas.
c) Las palabras de lashón hará se comparan con flechas porque una vez que fueron arrojadas no pueden recuperarse.
La lengua es comparada con una flecha, tal como dijo el profeta: “Sus lenguas son como echas aguzadas, que hablan engaño…” – Jeremías 9:7.
¿Cuál es la corrección que puede hacer alguien que habló lashón hará?…
No hay manera de rectificar lo que se ha hecho…
Una pequeña historia nos dara mas idea de esta cuestión:
«Una persona difundió un rumor sobre otra persona. Después se arrepintió y fue a hablar con el pastor para preguntarle cómo podía corregir lo que había hecho.
– Compra una bolsa de semillas –le dijo el pastor- luego busca un gran campo abierto y esparce las semillas al viento. Hazlo y regresa dentro de una semana.
El hombre hizo exactamente lo que le indicaron y regresó una semana más tarde para saber qué más debía hacer.
– Ahora –le dijo el pastor- regresa al campo y recoge todas las semillas.
– ¡Pero esas semillas fueron esparcidas a lo largo y a lo ancho del campo! –protestó el hombre- Nunca lograré encontrarlas a todas. ¡Incluso es posible que algunas ya hayan echado raíces!
– Exactamente –le explicó el pastor-. Ahora lo entiendes. Cuando hablas mal de otra persona el efecto es muy amplio. Y es un daño que no puede corregirse del todo»
3. El Lashón hará destruye la verdadera esencia de la persona:
a) Génesis 2:7 – La cualidad que identifica al alma humana es el poder del habla, de la cual carecen los animales.
«Y Dios formó al hombre del polvo de la tierra, e insufló en su nariz el alma de vida; y el alma se volvió un alma viviente»
〉Onkelos:
“El hombre se volvió un alma viviente” – Se volvió un alma hablante.
〉Rashi:
“El hombre se volvió un alma viviente” – también los animales y las bestias son llamados “almas vivientes” [Génesis 1:24, 30], pero el alma del hombre es la más viva de todas, porque se le incorporó a esta alma la facultad de razonar y de hablar [la cual no tienen los animales].
b) Debido a que el habla combina aspectos físicos y espirituales de la persona, esto define su esencia como ser humano. Por lo tanto, la persona que habla lashón hará abusa y corrompe su propia esencia.
La capacidad humana de hablar no se debe tan sólo a los órganos físicos del habla [sino que también proviene de su alma]… Por lo tanto, la esencia del hombre es la de ser un ser vivo capaz de hablar [porque su capacidad de hablar combina sus aspectos físicos y espirituales] … En consecuencia, si alguien habla lashón hará… peca con su habla, que es su misma esencia. [Por otra parte, si habla de la manera adecuada] perfecciona su esencia.
- Las causas de Lashón hará:
Si el lashón hará es algo tan terrible, ¿por qué la gente lo sigue hablando? Las fuentes en esta sección analizaran las razones que se encuentran en la raíz misma del lashón hará. Es importante entender las causas para poder ser capaces de extirparlas y evitar el lashón hará.
1. Una actitud negativa:
Una actitud negativa respecto a los demás implica que siempre encontremos algún defecto que haya que mencionar.
El Rey Salomón escribió:
«Los necios se mofan del pecado; Mas entre los rectos hay buena voluntad»
Esto significa: el tonto constantemente está buscando los defectos de las personas y pone a los demás bajo tela de juicio. Él nunca habla positivamente sobre los atributos positivos de los demás.
2. Arrogancia:
La característica de la arrogancia puede encontrarse en la raíz misma del lashón hará, tal como lo ilustran los pasajes siguientes.
a) Deuteronomio 8:11-14 – «La prohibición de olvidarse de Dios»
Ten cuidado de no olvidarte del Eterno, tu Dios… no vaya a ser que comas y estés satisfecho, y que construyas buenas casas y te asientes…y que incrementes tu plata y tu oro y todas tus posesiones – y que tu corazón se vuelva arrogante y olvides a Dios.
b) Debido a que la arrogancia lleva a que la persona se olvide de Dios, debemos no ser arrogantes.
¿Cuál es el consejo contra la arrogancia? …
Rab Najman bar Itzjak dijo:
Está escrito: ‘No vaya a ser que tu corazón se vuelva arrogante y olvides a Dios’ [Deuteronomio 8:14]. [Esto nos enseña que la altivez implica ignorar a Dios, y se nos ordenó no olvidar a Dios] tal como está escrito: ‘Ten cuidado de no olvidarte del Eterno, tu Dios’ [Ibíd. 8:11].”
Rashi:
“No vaya a ser que tu corazón se vuelva arrogante y olvides a Dios” – De aquí aprendemos que la arrogancia lleva a la persona a olvidarse de su Creador. Y se nos ha prohibido olvidarnos del Creador, tal como está escrito: “Ten cuidado de no olvidarte del Eterno, tu Dios” [Por lo tanto, está prohibida la arrogancia porque ella lleva a olvidarse de Dios].
c) Quien habla negativamente de los demás implícitamente está diciendo que él es superior a ellos, y por lo tanto es arrogante.
Cuando una persona habla lashón hará, transgrede la prohibición de olvidar a Dios debido a la arrogancia – Deuteronomio 8:11-14.
El hecho de hablar con condescendencia de los demás indica que se considera a sí mismo superior y más sabio que los demás. Si la persona tuviera conciencia de sus propias de ciencias no hablaría negativamente de los demás.
- Odio:
a) Según los judíos el Segundo templo fue destruido debido al odio infundado y gratuito y a la falta de amor y de unidad en el pueblo judío.
¿Pero por qué fue destruido el Segundo Templo?
Era porque a pesar de que los judíos se ocupaban del estudio de la Torá, «cumplían» los mandamientos y realizaban actos de bondad. Algo pasaba y era que había entre ellos odio gratuito algo muy importante…
b) El odio provoca que se hable de manera negativa incluso de los actos positivos que realizan los demás.
Está prohibido odiar a otra persona, tal como afirma el versículo: “No odiarás a tu hermano en tu corazón” (Levítico 19:17)…
El odio es una característica que provoca muchas transgresiones, incluyendo el lashón hará, porque aquella persona que siente odio se ve inclinada a expresar sus sentimientos negativos sobre la otra persona…
Debido al propio odio, se ridiculizan incluso los aspectos positivos de la otra persona y se intenta mostrar esos actos positivos como si fueran negativos ante uno mismo y ante los demás.
- Enojo:
a) Una persona enojada generalmente no puede controlar sus actos, y provoca peleas y discusiones.
Cuando las personas están enojadas, y refuerzan su propia ira, no tienen conciencia de lo que hacen y en medio del enojo hacen muchas cosas que no harían cuando están calmadas.
Porque el enojo lleva a pensar de manera irracional y a hablar movidos por la ira, así provocando de esta manera peleas y discusiones.
Siendo incapaz de pensar, la persona que está perdida en su enojo pierde también la perspectiva.
El camino sinuoso parece derecho, lo prohibido parece permitido. Cuando la persona no está guiada por la razón, acude a los insultos, las peleas e incluso a la violencia.
5. Celos:
El lashón hará y la calumnia son producto de los celos y del enojo…
6. Excesivas conversaciones vanas:
Hablar excesivamente de cosas que carecen de sentido, puede llevar a que se termine hablando negativamente de los demás.
Esta es la manera de comportarse de los burlones… comienzan hablando excesivamente sobre cosas que carecen de sentido, tal como está escrito: “La voz del insensato se oye con una multitud de palabras” [Eclesiastés 5:2].
Esto lleva a hablar en tono despreciativo de las personas rectas, tal como está escrito:
Salmos 31:19 – “Enmudezcan los labios mentirosos, que hablan arrogantemente contra el justo…”
Hablar demasiado con muy poco contenido crea un vacío que puede verse lleno con comentarios negativos y dañinos, tal como lo ilustra el siguiente artículo.
Sheyla McKnight, “Workplace gossip? Keep it to Yourself” (“¿Chismes de tu lugar de trabajo? guárdalos para ti mismo”, 15 de noviembre 2009, nytimes.com – Una compañía en la cual no se toleran los chismes ni los malos comentarios sobre otros colegas.
Yo trabajo como asistente de servicio técnico en una compañía impresora en línea con base en Livingston, Montana. Formo parte de un equipo de tres personas. Nuestra tarea es proveer control de calidad a los trabajos de impresión, llamar a los clientes locales para avisarles cuando sus pedidos están listos y enviar paquetes de muestras a clientes potenciales. También ayudamos a otros departamentos con proyectos especiales y tenemos turnos atendiendo en la recepción, recibiendo a los clientes y atendiendo las llamadas telefónicas.
Dos años atrás, al comenzar mi entrevista de admisión al empleo, Marne Reed, la directora de recursos humanos, mencionó la política de la compañía de no permitir chismes dentro de la misma. Ella me dijo algo así como: “Aquí no hay lugar a críticas desleales ni a provocar conflictos. No se toleran de ninguna manera los chismes ni los comentarios por la espalda de otra persona”.
Recuerdo que pensé: “¿De veras? Eso suena raro… ¿Cómo es posible?” En todos los otros lados en los cuales había trabajado la gente hacía comentarios y se intercambiaban chismes, por ejemplo cuando alguien se equivocaba o era despedido. Pero yo afirmé el formulario aceptando mi acuerdo con los “valores de la compañía” y recuerdo haberme sentido sumamente optimista al respecto. La política sonaba alentadora. Ahora que ya formo parte de la empresa durante un buen tiempo, puedo asegurar que esto marca una enorme diferencia en el ambiente del trabajo.
En mi trabajo anterior, el chismerío era desenfrenado. Muchas personas tenían actitudes negativas. Los empleados se frustraban si una personaba haraganeaba o no trabajaba seriamente y se desahogaban hablando de eso. Por mi parte, yo tenía miedo de decir algo porque no sabía quién repetiría algo de lo que dije, cómo podrían cambiar mis palabras o usarlas en mi contra. Los empleados incluso comentaban respecto a lo que los demás hacían los fines de semana, por ejemplo a qué bar habían ido. Cada uno se cuidaba a sí mismo y era muy incómodo estar allí.
Es mucho mejor sentirme parte de un grupo aquí que en cualquier otro lugar en los que he trabajado. Si los empleados violan la política de la compañía, uno de los directores habla con ellos y si no cambian su manera de comportarse, deben buscarse otro trabajo.
Para evitar hablar negativamente de los demás, a veces es mejor tratar de hablar de temas menos “interesantes”, tal como lo ilustra humorísticamente la siguiente historia.
“Un Shabbat se alojó en una posada y el propietario de la misma, sin reconocer su identidad, lo sentó en una mesa junto a muchos otros huéspedes que se dedicaban al comercio de caballos. Durante toda la comida la conversación giro alrededor de los caballos.
Al terminar el Shabat, alguien informó al propietario de la posada sobre la verdadera identidad del Jafetz Jaim. El propietario se disculpó con el Jafetz Jaim por haberlo ubicado con compañeros tan poco refinados. El Jafetz Jaim le respondió: “Por el contrario. Para mí fue un placer sentarme con ellos. ¡Solamente hablaron de caballos y no sobre otras personas!”
- Estrategias para mejorar nuestra manera de hablar:
Recuerda que estas herramientas no logran por sí mismas cambiar nuestros hábitos, pero sí logran alterar la calidad de nuestras relaciones y la manera en que enfocamos la vida.
1. Ver a los demás de forma positiva:
La manera en la cual tú ves a los demás es la manera en la cual ellos serán ante tu presencia. Nuestra actitud hacia los demás en gran medida es una profecía que se auto-realiza.
Si tú consideras que los demás serán amigables y considerados contigo, la mayoría de las personas te tratarán de esta manera. Si tú asumes que los demás siempre son egoístas y desconsiderados, los tratarás de una manera acorde a tu pensamiento y recibirás exactamente aquello que esperabas.
Por supuesto que habrá muchas personas que te tratarán de la misma manera sin importar cómo tú te relaciones con ellos. Pero en gran medida, los demás actúan como un reflejo de la manera en que eres con ellos.
Tal como dicen los Proverbios 27:19:
“Así como en el agua, un rostro refleja otro rostro, así también el corazón del hombre al hombre”
Hay una antigua historia que ilustra este punto:
Un anciano estaba sentado en las afueras de la ciudad. Alguien que se dirigía a la ciudad se acercó al anciano y le dijo: “Estoy pensando mudarme a vivir en esta ciudad. ¿Me podría describir cómo son los residentes del lugar?”
“¿Cómo son los habitantes del lugar donde tú vives ahora?” – le preguntó el anciano.
“Esa es la razón por la cual me quiero ir de ese maldito lugar” –respondió el joven. “Son egoístas, distantes e indiferentes. Son desconsiderados y maleducados y ya no aguanto más estar con ellos”.
“Qué pena”, le dijo el anciano. “La gente de este pueblo es exactamente como en tu propio pueblo. No vale la pena que te mudes aquí”.
Unos pocos días después, otro hombre joven llegó al mismo camino y se acercó al anciano con la misma pregunta: “¿Cómo es la gente de este pueblo? Estoy pensando en mudarme a vivir aquí”.
“¿Cómo son los habitantes del lugar donde tú vives ahora?” – le preguntó el anciano.
“Maravillosos” –le respondió el segundo joven-. “Prácticamente todos son amables conmigo. Los amo profundamente. Pero me gusta tanto la gente que preferiría vivir en una ciudad más grande y por esa razón estoy pensando en mudarme”.
“Eres muy afortunado”, le dijo el anciano. “La gente en esta ciudad es exactamente como la de tu pueblo. Te gustará mucho vivir aquí. Fácilmente tendrás nuevos amigos y la gente te tratará de la misma manera como te tratan en tu pueblo”.
Cuando sinceramente amas a los demás, ellos lo sienten y te tratan con los mismos sentimientos positivos que tú tienes hacia ellos. Y la persona que ve a los demás de una manera positiva se verá menos tentada a decir cosas dolorosas…
(Rab Zelig Pliskin – The Power Of Words)
a) La cura para el lashón hará es ver lo positivo en las personas que nos rodean:
La clave para evitar el lashón hará es cultivar verdadero amor y respeto entre las personas… ¿Por qué centrar la atención en los defectos del otro? Es mejor prestar atención a las singulares características positivas que poseen los demás.
Además de ver lo positivo en las personas, la persona recta debe esforzarse por ver lo positivo en todos los aspectos de la vida, tal como lo ilustra la siguiente fuente.
b) Una persona recta ve lo positivo en cada cosa:
Una persona recta cubre los defectos de las personas y siempre elogia aquello que es digno de elogio… Cuentan que una vez un hombre sabio y otra persona iban caminando juntos cuando pasaron al lado de un animal muerto. La otra persona dijo: “¡Qué desagradable!” El hombre sabio le respondió: “¡Qué blancos son sus dientes!”
c) La absoluta determinación a superar el negativismo es un requisito previo para poder desarrollar una actitud positiva:
La absoluta determinación a superar los patrones negativos es lo que influye e inspira a las personas para abandonar los pensamientos, las palabras y los actos negativos…
Recuerda centrar tu atención en las acciones positivas y no en detener una acción negativa.
Mantén tu atención centrada en aquello que tú deseas pensar. Habla y actúa de manera positiva.
Cuando tienes pensamientos positivos, automáticamente dejas de tener pensamientos negativos. Cuando hablas de manera positiva, automáticamente dejas de hablar de manera negativa. Cuando actúas positivamente, automáticamente no actúas de manera negativa.
Una gran ayuda para lograr desarrollar una mirada positiva hacia los demás es reconocer que cada persona fue creada a imagen y semejanza de Dios
d) Comprender que el hombre fue creado a imagen y semejanza de Dios inspira una mayor valoración de los demás.
El lashón hará es una manifestación de desprecio hacia el valor de la otra persona. El antídoto para esta actitud negativa se encuentra en las mismas palabras de Pirkei Avot (3:18): “Amado es el hombre, porque fue creado a imagen y semejanza de Dios”. Por lo tanto, respetar a otra persona es respetar la imagen de Dios. En consecuencia, considerar el valor y la dignidad de otro ser humano lleva a una sociedad de buena voluntad y de beneficiosa hermandad.
2. Desarrollar la humildad:
¿Cómo se corrige el hábito de hablar lashón hará?
a) Estudia la Palabra de Dios y trabaja tu humildad:
b) Una persona humilde habla de manera gentil, evita las peleas y es un placer tenerla cerca:
Respecto a la humildad y a la manera de hablar, algunos Sabios dijeron: “Siempre se debe hablar a las personas de manera gentil” (Ioma 86a). También está escrito específicamente: “Las palabras del sabio, pronunciadas gentilmente, son aceptadas” (Kohelet 9:17), porque nuestras palabras deben expresar honor [hacia los demás] y no ser degradantes …
Aun más, su compañía es muy placentera y él halla de manera automática favor en los ojos de las personas. Obviamente una persona así no provoca enojo ni peleas.
Por el contrario, todo lo que [ella hace] lo hace con calma y tranquilidad.
¡Dichosa la persona que tiene el privilegio de adquirir esta virtud!
c) Comportarnos con humildad en todas nuestras interacciones:
La persona debe comportarse con humildad con las otras personas en todas las interacciones cotidianas y en sus relaciones comerciales.
3. Ama a tu prójimo como a ti mismo:
El odio infundado y el consecuente lashón hará fueron las causas de la destrucción del Primero y del Segundo Templo de Jerusalén.
Además, si el odio infundado lleva a hablar negativamente de los demás, entonces el amor provocará que se hable positivamente de ellos. Tal como lo describe la siguiente fuente, el amor es la cura para el lashon hará.
a) Levítico 19:18 – Trata a los demás como te gustaría ser tratado, es decir, con respeto.
b) Amar al prójimo como a uno mismo en la práctica implica no herir a los demás, ni siquiera a través de nuestras palabras.
Los elementos incluidos en esta objeción siguen el principio general de que uno debe tratar a la otra persona de la manera en que se trataría a uno mismo, es decir, protegiendo su propiedad, evitando que sea dañado, hablando solamente bien de él, respetándolo y, por cierto, no glorificándose a uno mismo a costa del otro.
c) La cura para el lashón hará es “amar al prójimo como a uno mismo” y centrar la atención en los aspectos positivos de los demás.
[En vista de todo lo que hemos estudiado, debería quedar claro que no es suficiente solamente abstenerse de hablar lashón hará].
La prohibición contra el lashón hará requiere que no prestemos atención a las fallas y los defectos de los demás. La raíz del lashón hará es relacionarnos en nuestros propios corazones de manera negativa con los otros.
d) Un principio fundamental de la Palabra.
e) El cumplimiento de muchos otros mandamientos depende de “amar al prójimo como a uno mismo”.
Rabi Akiva afirmó: “Éste es un principio básico de la Torá”, lo cual significa que muchos mandamientos están relacionados con éste. Porque cuando uno ama a su prójimo no robará sus pertenencias, no lo engañará con su esposa, no lo defraudaráá ni lo insultará, no traspasará los límites de su propiedad, ni le provocará ninguna clase de daño.
Por lo tanto, el cumplimiento de muchos otros mandamientos depende del cumplimiento de éste.
e) Dañar a otro es equivalente a dañarse a uno mismo.
Imagina a una persona que está cortando un trozo de carne y que accidentalmente se corta su propia mano.
¿Sería lógico que para vengarse ella le pegara a la mano que tiene el cuchillo?
4. Controlar el enojo:
a) Hablar gentilmente y con respeto es un hábito que debe ponerse en práctica, porque eso ayuda a que la persona logre evitar enojarse.
Acostúmbrate a hablar de manera gentil a todas las personas y en todo momento; al hacerlo, te salvarás del enojo. Cuando te alejas del enojo, adquieres humildad, que es la cualidad más importante de todas las cualidades positivas… Por lo tanto, te explicaré cómo debes actuar con humildad. Debes hablar siempre de una manera amable… considera que cada persona es más importante que tú mismo…
Como dice la Escritura:
Filipenses 2:3 – «Nada hagáis por contienda o por vanagloria; antes bien con humildad, estimando cada uno a los demás como superiores a él mismo»
b) A pesar de que en relación a la mayoría de las cualidades del carácter se debe tomar un “camino intermedio” de moderación, respecto al enojo se debe adoptar un “camino extremo” y evitarlo siempre.
Hay ciertos rasgos de carácter de los cuales la persona debe alejarse completamente. De hecho, está prohibido tomar [el enfoque normal de] el “camino intermedio” respecto a estos rasgos de carácter…
El enojo es un rasgo de carácter extremadamente negativo y lo adecuado es que la persona se aleje de él hasta llegar al extremo opuesto. La persona debe acostumbrarse a no enojarse ni siquiera a causa de algo por lo cual sería adecuado sentir enojo.
A pesar de que el sabio Rambam generalmente enseña que la persona debe encontrar un equilibrio en sus rasgos de carácter –ser fuerte pero flexible, compasivo pero firme- el enojo es una excepción.
Respecto al enojo no hay un “camino intermedio”, sino que se lo debe evitar siempre y bajo todas las circunstancias. Como esto puede parecer un objetivo imposible de alcanzar, la persona debe comenzar a acostumbrarse a no enojarse durante períodos breves, tal como lo explica la fuente siguiente.
c) Dedica alrededor de quince minutos cada día para practicar respondiendo a todo con paciencia y sin enojarte.
Vamos a aprender a ser pacientes: fijaremos determinada cantidad de tiempo cada día –por ejemplo, alrededor de quince minutos- en los cuales nos esforzaremos para reaccionar con paciencia ante todo lo que veamos y escuchemos, incluso ante aquellas cosas que puedan llegar a dañarnos, sin perder la compostura.
En los casos en los cuales sea necesario u obligatorio reaccionar, lo haremos de manera controlada, con palabras tranquilas y sin manifestaciones extremadamente emocionales.
Basándonos en las dos fuentes previas, la persona debe tomarse alrededor de quince minutos cada día para trabajar esforzándose por llegar al “extremo opuesto” del enojo y practicar la paciencia.
5. Verse a uno mismo como un alma y no como un cuerpo:
a) Mientras la persona más se identifica a sí misma como un alma viva en un mundo ilimitado, estaráá menos inclinada a competir y a hablar mal sobre el éxito de los demás.
Mientras la persona más se identifica con su cuerpo, será más proclive a hablar negativamente de los demás.
Una persona que habla lashón hará se está declarando en competencia con otra persona. Al aprender a hablar adecuadamente, unificamos al pueblo de Dios.
6. Desarrollar hábitos de conversación constructivos y refinar el arte del silencio:
a) Al desarrollar hábitos constructivos y productivos en la manera de hablar, la persona naturalmente evita el lashón hará:
Ésta es la manera de actuar de los cínicos y de las personas malvadas: comienzan hablando excesivamente sobre cosas vanas.
Sin embargo, los justos y virtuosos del pueblo de Dios hablan tan sólo palabras de sabiduría y cordura.
Como con todos los buenos hábitos, para poder desarrollarlos es necesario tener paciencia y coherencia, tal como lo ilustra la siguiente fuente.
b) Quien siempre busca algo constructivo que se pueda decir, inevitablemente se vuelve una mejor persona:
A veces, una persona puede necesitar una solución creativa para lograr cambiar sus hábitos respecto a la manera de hablar.
A veces no es suficiente con esforzarnos por hablar de manera positiva. En algunas ocasiones la única solución es permanecer callados.
c) Permanecer callados nos trae una gran recompensa:
“La muerte y la vida se encuentran en la lengua” (Proverbios 18:21) – evitar hablar lashón hará puede brindar una nueva vida.
La mayoría de las personas se sienten incómodas al permanecer en silencio. Prefieren oír a alguien hablar, aunque se trate de palabras vanas o negativas.
7. Oración:
Nuestros esfuerzos para lograr nuestros objetivos van acompañados de oraciones pidiéndole a Dios que nos ayude.
8. El estudio de la Palabra:
El estudio de la Palabra es la base misma de la vida cristiana. Uno de los objetivos del estudio de la Palabra es aprender a refinar nuestro carácter. Lo cual nos ayuda a entender el significado y a seguir las reglas de la manera adecuada de hablar y poder vivir una vida en orden y en comunión con Dios.
- Transcendencia de Lashón Hará, algunos ejemplos:
〉Destrucción del 2º Templo:
Escrito en el Talmud (Yoma 9b, Yerushalmi Yoma 1:1)
…Al final del período del Segundo Templo el odio sin causa y el Lashon hara aumentó entre nosotros, y por esta razón el Templo fue destruido y fuimos exiliados de nuestra tierra.
〉El exilio fue decretado sobre Israel cuando los espías en el desierto hablaron lashon hara sobre la tierra de Israel :
Más aún, es sabido que el exilio ya había sido decretado sobre nosotros desde que los espías cometieron su pecado como está escrito en los Salmos (106:26-27): y explicado por Rashi y por el Ramban en su comentario a Numeros [14:1]. Y sabemos que el pecado de los espías fue hablar Lashon hara, Por eso para salir del exilio tenemos que corregir este pecado primordialmente… Todo el que cuida su palabra está aportando su parte en la reconstrucción del Bet Hamikdash (Templo de Dios).
〉La shejina [presencia divina] se apartó de Israel también por el pecado de lashon hara :
…Está escrito en el Midrash Rabba, Parashat Ki Teitze [6:14]: «Dijo el Santo Bendito sea: “En este mundo porque hubo Lashon hara entre ustedes yo aparté mi presencia de entre ustedes pero en el mundo venidero Eliminaré el Yetzer hara de ustedes…y Regresaré Mi presencia a estar de nuevo entre Ustedes...
〉Lashon hara es el peor pecado de todos; el hombre será juzgado por todo lo que diga :
“El hombre será juzgado por todo lo que dice, hasta la expresión más insignificante no será ignorada. Por eso te advierto que aprendas a sentarte a solas tanto como te sea posible, porque el pecado de la lengua es el más severo, como dicen algunos sabios «Estas son las cosas que…y LASHON HARA (Lengua maligna) equivale a todas ellas» Algunos sabios dijeron: “todas las Mitzvot y la Torá de la persona no son suficientes para contrapesar lo que sale de su boca”
〉La arrogancia, la causa principal de Lashón hará:
La arrogancia es la causa principal de que las personas hablen Lashón hará. Cuando alguien se siente superior a otros, le parece fácil hacer burla de ellos. Además, una persona arrogante tendrá envidia de las personas exitosas y buscará sus faltas para hablar mal de ellos y así disminuir la estima que otros sienten por ellos.
〉La pobreza (lepra) es uno de los castigos por hablar Lashón hará:
Maria criticó a su hermano Moisés y en consecuencia sufrió de tzaraat (una enfermedad similar a la lepra) – (Números 12:1-15).
El sufrimiento de Maria le recuerda a cada generación que se debe ser muy cuidadosos con las palabras que se pronuncian – Deuteronomio 24:8-9.
En la época cuando el Bet Hamikdash (Templo de Salomón) existía, si alguien hablaba Lashon hara era castigado con lepra. Ya que la lepra y la pobreza son equivalentes (Nedarim 64b) [Ya que ambas sirven para volver humilde a la persona, y para quitarle su arrogancia], después de la destrucción del Bet Hamikdash, aquel que habla Lashon hara está destinado a sufrir pobreza. (Sefer Hakana y Tikuney Zohar).
Cuando alguien habla Lashon hara sobre otra persona, en ese mismo momento sus pecados son mencionados en el Cielo. (Rav Jayim Vital – Shaar Hakeddusha)
«La muerte y la vida están en poder de la lengua» (Prv 18:21).
La lengua de una persona es más poderosa que la espada. La espada solo puede matar a alguien que está cerca; la lengua puede matar a alguien que está lejos. (Arajin 15b).
Lashon hara mata a tres personas: Al que habla, al que escucha y al sujeto de quien se habla. (Arajin 15b).
- El que relata Lashon hará causa que el que escucha peque y esto es peor que el asesinato:
Cuando una persona relata Lashon hara, no solo trasgrede él mismo, sino que causa que el que escucha también trasgreda.
Algunos sabios del judaismo han dicho: «Causar que alguien trasgreda es un crimen mayor a que si uno lo asesina. Un asesino le quita la vida en este mundo; alguien que causa que otro trasgreda le quita la vida eterna«
- El que calla otorga:
Alguien que se sienta entre personas que hablan Lashón hará y que sabe que ellos no escucharán su amonestación, y por lo tanto permanece en silencio, será castigado.
Ellos tomarán su silencio como aprobación. Al escuchar Lashón hará, usted está obligado a defender a la víctima. Ya que es extremadamente difícil amonestar a otras personas constantemente, uno debe alejarse de la compañía de los malvados.
- Alejarse de disputas necias:
Si alguien se encuentra en medio de una disputa, debe alejarse de la disputa inmediatamente para así no cometer el pecado de Lashón hará (lengua maligna).
Algunas personas se sienten avergonzadas si se retiran a la mitad de una disputa.
«Es mejor que una persona sea considerada como un tonto toda su vida por los hombres, a ser considerado como un malvado, aunque sea por sólo un momento, ante los Ojos de Dios»
- Observamientos del guardar la lengua maligna:
〉Mejor el ayuno de palabra que el ayuno de comida:
Si una persona desea ayunar por arrepentimiento [Teshuva], abstenerse del habla es preferible a la abstención de la comida.
Este método es mejor, tanto para el cuerpo como para el alma.
«Quien quiera juzgue a otra persona, ya sea favorablemente o para criticarlo, está en efecto, juzgándose a sí mismo.
Por ejemplo, si alguien comenta que la buena acción de tal y tal persona merece la bendición de YHVH por su acción encomendable, o que tal y tal hombre merece ser castigado por sus malos actos o por sus malas palabras, esos mismos comentarios son traspasados y se convierten en un veredicto para él, ya sea favorable o desfavorable»
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hoy desperté y abrí mi biblia y se abrió en el libro de los salmos 34: 12,13,14. era la palabra que requería para compartirla con mi grupo! gracias al Eterno y a ustedes
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