Hoy comenzaremos a adentrarnos en el estudio de las dos casas de Israel, es un tema muy actual ya que esta saliendo a la luz después de muchos años en la sombra. Este tema esta saliendo a la luz porque se están cumpliendo cada profecía dada en las Escrituras, donde el Eterno hizo la promesa que reunificaria a ambas casas y serian otra vez una sola, por una parte la casa de Efraín y por otro lado la casa de Judá – (Explicaremos esto mas adelante).
Primero que nada tengamos en cuenta, que no se trata de una religión en especial, recordemos que nuestro Mesías nunca dijo:
“He venido a crear una religión para mi, y ese tendrá un nombre con la que se identifique (ejemplo testigo de jehová, católicos, cristianos, evangelicos, mesiánicos. judaísmo, he islamismo)”
Todos estos son grupos extra-biblicos y muchos mas que grupos algunos son realmente sectas.
Pero realmente la Biblia nos habla de un pueblo en especifico en el que se centra toda la atención, y este es el pueblo de Israel. Sin duda alguna de principio a final, la Biblia habla de un pueblo llamado Israel. Dios tiene una relación especial con este pueblo.
Pero, hoy en día, ¿Quién es Israel? ¿Son sólo los judíos, o la iglesia cristiana? Este estudio apunta a aclarar estas dudas. Los creyentes necesitamos saber qué lugar ocupamos en el pueblo de Dios.
Realmente uno de los propositos principales del Mesías era de venir a a por las ovejas perdidas de Israel y reunirlas en un solo rebaño. Pero…
¿Quien es Israel?
Los libros de política o historia dicen que los israelitas son las personas que han nacido o tienen ciudadanía en el moderno Estado de Israel. Algunos dicen que Israel lo conforma todos los judíos, dondequiera que vivan. Otros aseguran que la Iglesia Cristiana ha venido a tomar el lugar bíblico que ocupaban los israelitas.
¿Quién tiene la razón?
La respuesta está a simple vista: en la Biblia. Pero debemos escudriñar y seguir la pista a este pueblo a través de la Palabra de Dios para poder descubrir la verdad. Este conocimiento es un tesoro que ha estado escondido, pero que en estos tiempos está saliendo a la luz como mencionamos mas arriba.
Para saber quién es Israel, debemos primero conocer el origen de este pueblo.
Comencemos…
- Adentrándonos a la historia:
Antes de comenzar a explicar todo el meollo principal debemos comenzar para comprender esto a cabalidad desde sus orígenes y esto nos lleva a un viaje de miles de años atras en el pasado, es decir esto nos lleva a los tiempos de nuestro padre Abraham.
De Génesis capítulo uno al once, la historia bíblica habla de la humanidad en general. Todos venimos de Adán, y todos venimos de Noé y sus hijos. Ésta es la historia del origen de todos los hombres.
Pero a partir del capítulo 12 de Génesis hasta Apocalipsis, la Biblia se enfoca en una nación en especial: Israel. En el libro de Génesis vemos cómo Dios formó esta nación de un hombre que no tenía hijos, y de una familia que no tenía tierra.
El padre del pueblo escogido era Abraham, quien fue llamado para formar esta nación especial.
Genesis 12:1-2 – «Pero el Eterno había dicho a Abram: Vete de tu tierra y de tu parentela, y de la casa de tu padre, a la tierra que te mostraré. Y haré de ti una nación grande, y te bendeciré, y engrandeceré tu nombre, y serás bendición»
Dios escogió a Abram y a sus descendientes, y prometió que los bendeciría. Entonces, ¿la bendición de Dios sólo iba a ser para Abram y sus descendientes? ¿Qué de las otras familias y naciones? Debemos seguir leyendo para saber; la Biblia sigue diciendo:
Génesis 12:3 – «Y bendeciré a los que te bendijeren, y a los que te maldijeren maldeciré: y serán benditas en ti todas las familias de la tierra»
A través de Abraham y su familia, la bendición de Dios va a alcanzar a todas las familias de la Tierra.
- La promesa:
Dios le prometió a Abraham que le daría “tierra y descendencia”. Se requería de fe para creer en esta promesa, ya que Abraham tenía más de 90 años y su mujer era estéril. Además vivían en Canaán como extranjeros, y como tales no se les permitía comprar tierra. Pero Dios hizo un pacto eterno con Abraham.
Génesis 17:7-8 – «Y estableceré mi pacto entre mí y ti, y tu descendencia después de ti en sus generaciones, por pacto perpetuo, para ser tu Dios, y el de tu descendencia después de ti. Y te daré a ti, y a tu descendencia después de ti, la tierra en que moras, toda la tierra de Canaán en heredad perpetua; y seré el Dios de ellos»
De nuevo, Dios le confirma a Abraham que la bendición que le daría a él y a su familia redundaría en beneficio de toda la humanidad.
Génesis 22:18 – «En tu simiente serán benditas todas las naciones de la tierra, por cuanto obedeciste mi voz»
A través de la simiente de Abraham serían benditas todas las naciones de la tierra. Sin embargo, antes de bendecir a todos, tenía que formar esta nación para cumplir con Su propósito.
- Herederos de la promesa:
De todos los hombres sobre la faz de la Tierra, Abraham fue el elegido por Dios para formar una nación que traería bendición a todas las familias del mundo.
Pero, ¿cómo podría conformar una nación si él y su mujer no tenían hijos? Además de eso, Abraham tenía 75 años cuando fue llamado. Lo que para ellos era imposible, para Dios no era un problema. Lo que Él promete, lo cumple. A los cien años le nació el “hijo de la promesa”: Isaac.
(Para un estudio mas a profundidad sobre esto ver nuestra serie de Estudios de Génesis)
Pero antes, tratando de “ayudar” a Dios, Sara sugirió a Abraham tener un hijo con su sierva, Agar. Así lo hicieron, y nació Ismael. Pero Dios no necesita ayuda, y Él les aclaró que ese hijo no era el de la promesa. Lo que hicieron Abraham y Sara les trajo muchos problemas familiares (Gen. , que han trascendido las generaciones, y hoy se refleja en el conflicto árabe-israel ambos pueblos descendientes de Abraham).
Luego de la muerte de Sara, Abraham tuvo otra mujer, y con ella tuvo más hijos.
Génesis 25:1-2 – «Y Abraham tomó otra esposa, cuyo nombre era Cetura; (2) la cual le dio a luz a Zimram, a Jocsán, a Medán, a Madián, a Isbac y a Súa»
Sin duda Ismael y los hijos de Cetura son hijos de Abraham. Pero la Biblia señala que no todos son herederos de la promesa: Tierra y descendencia. Todos los hijos de Abraham recibieron herencia, pero la promesa sólo la heredó Isaac.
Génesis 25:5-6 – «Y Abraham dio todo cuanto tenía a Isaac. (6) Y a los hijos de sus concubinas dio Abraham dones, y los envió lejos de Isaac su hijo, cuando aún él vivía, hacia el oriente, a la tierra oriental»
Sólo Isaac quedó en Canaán, la Tierra de la promesa.
- Confirma la promesa:
Cuando hubo hambre en la tierra, Isaac consideró marcharse en busca de alimento. Pero Dios lo detuvo, y le dijo que permaneciera en Canáan. Allí mismo le confirmó el Pacto que había hecho con Abraham.
Génesis 26:1-6 – «Y hubo hambre en la tierra, además de la primera hambre que hubo en los días de Abraham; y se fue Isaac a Abimelec rey de los filisteos, en Gerar. (2) Y se le apareció YHVH, y le dijo: No desciendas a Egipto; habita en la tierra que yo te diré. (3) Habita en esta tierra, y seré contigo, y te bendeciré; porque a ti y a tu simiente daré todas estas tierras, y confirmaré el juramento que hice a Abraham tu padre. (4) Y multiplicaré tu simiente como las estrellas del cielo, y daré a tu simiente todas estas tierras; y todas las naciones de la tierra serán benditas en tu simiente, (5) por cuanto oyó Abraham mi voz, y guardó mi precepto, mis mandamientos, mis estatutos y mis leyes. (6) Habitó, pues, Isaac en Gerar»
Dios confirmó a Isaac la promesa que le hizo a Abraham:
- Tierra.
- Descendencia.
- Bendición a todas las naciones de la Tierra.
- Hijos de Isaac:
Isaac tuvo dos hijos gemelos. Uno pensaría que ambos iban a ser herederos de la promesa…pero no fue así.
En términos humanos, la herencia y la primogenitura le hubieran tocado a Esaú, el gemelo que nació primero. Pero Dios tenía otros planes. Desde que ambos estaban en el vientre de su madre, Dios determinó que el segundo sería el primero. Dios sabía que Esaú iba a rechazar su primogenitura y a menospreciar el llamado especial que tenía su familia, mientras que Jacob lo anhelaba con toda su alma.
Tal vez nos cueste entender por qué un hermano es aceptado y otro es rechazado, pero Dios sabe por qué lo hace. Nuestra falta de entendimiento no le resta nada a la bondad y justicia perfecta de Dios. Sus planes son perfectos, y para bien de todos.
Pablo explica esto de la siguiente manera refiriéndose a las soberanía de Dios:
Romanos 9:6-16 – «…porque no todos los que son de Israel son israelitas; (7) ni por ser simiente de Abraham, son todos hijos; sino que: En Isaac te será llamada descendencia. (8) Esto es: No los que son hijos según la carne son los hijos de Dios, sino los que son hijos de la promesa son contados por simiente. (9) Porque la palabra de la promesa es ésta: A este tiempo vendré, y Sara tendrá un hijo. (10) Y no sólo esto, sino también cuando Rebeca concibió de uno, de Isaac nuestro padre (11) (aunque aún no habían nacido sus hijos, ni habían hecho bien ni mal, para que el propósito de Dios conforme a la elección permaneciese, no por las obras de la ley sino por el que llama), (12) le fue dicho a ella: El mayor servirá al menor. (13) Como está escrito: A Jacob amé; mas a Esaú aborrecí. (14) ¿Qué, pues, diremos? ¿Que hay injusticia en Dios? ¡En ninguna manera! (15) Porque a Moisés dice: Tendré misericordia del que yo tenga misericordia; y me compadeceré del que yo me compadezca. (16) Así que no es del que quiere, ni del que corre, sino de Dios que tiene misericordia»
Al bendecirlo, Isaac transfirió la promesa divina a Jacob (no a Esaú).
Génesis 28:3-4 – «Y el Dios omnipotente te bendiga y te haga fructificar, y te multiplique, hasta venir a ser multitud de pueblos; (4) Y te dé la bendición de Abraham, y a tu simiente contigo, para que heredes la tierra de tus peregrinaciones, que Dios dio a Abraham»
Dios se lo confirmó a Jacob en un sueño.
Génesis 28:12-15 – «Y soñó, y he aquí una escalera que estaba apoyada en tierra, y su extremo tocaba en el cielo: y he aquí ángeles de Dios que subían y descendían por ella. (13) Y he aquí, Jehová estaba en lo alto de ella, el cual dijo: Yo soy YHVH, el Dios de Abraham tu padre, y el Dios de Isaac: la tierra en que estás acostado te la daré a ti y a tu simiente. (14) Y será tu simiente como el polvo de la tierra, y te extenderás al occidente, y al oriente, y al norte, y al sur; y todas las familias de la tierra serán benditas en ti y en tu simiente. (15) Y he aquí, yo estoy contigo, y te guardaré por dondequiera que vayas, y te volveré a esta tierra; porque no te dejaré hasta tanto que haya hecho lo que te he dicho»
- Hijos de Jacob:
Jacob tuvo 12 Hijos.
¿Quién de ellos heredó la promesa divina de “tierra y descendencia”?
Por primera vez, todos fueron incluidos en la promesa – (Gen. 35:22-26).
Salmo 105:6-15 – «Oh vosotros, simiente de Abraham su siervo, hijos de Jacob, sus escogidos. (7) Él es YHVH nuestro Dios; en toda la tierra están sus juicios. (8) Se acordó para siempre de su pacto; de la palabra que mandó para mil generaciones, (9) del pacto que hizo con Abraham; y de su juramento a Isaac. (10) Y lo estableció a Jacob por decreto, a Israel por pacto sempiterno, (11) diciendo: A ti daré la tierra de Canaán, como porción de vuestra heredad. (12) Cuando ellos eran pocos en número, y extranjeros en ella; (13) cuando andaban de nación en nación, de un reino a otro pueblo; (14) No consintió que hombre los agraviase; y por causa de ellos castigó a los reyes. (15) No toquéis, dijo, a mis ungidos, ni hagáis mal a mis profetas»
¿Quiénes fueron herederos de la promesa que Dios hizo a Abraham de tierra y descendencia?
- No todos los hijos de Abraham…sólo Isaac.
- No todos los hijos de Isaac…sólo Jacob.
- Pero de todos los hijos de Jacob, los doce fueron incluidos.
- El pueblo de Israel lo conforman los descendientes de Jacob, también llamado Israel.
“Israel” es el nuevo nombre que Dios designó a Jacob cuando éste estaba regresando a la Tierra Prometida, luego de 20 años de exilio.
Génesis 35:9-15 – «Y se apareció otra vez Dios a Jacob, cuando se había vuelto de Padan-aram, y le bendijo. (10) Y le dijo Dios: Tu nombre es Jacob; no se llamará más tu nombre Jacob, sino Israel será tu nombre: y llamó su nombre Israel. (11) Y le dijo Dios: Yo soy Dios Omnipotente; crece y multiplícate; una nación y conjunto de naciones procederán de ti, y reyes saldrán de tus lomos. (12) Y la tierra que yo he dado a Abraham y a Isaac, la daré a ti: y a tu simiente después de ti daré la tierra. (13) Y se fue de él Dios, del lugar donde con él había hablado. (14) Y Jacob erigió una columna en el lugar donde había hablado con él, una columna de piedra, y derramó sobre ella libación, y echó sobre ella aceite. (15) Y llamó Jacob el nombre de aquel lugar donde Dios había hablado con él, Betel»
En Betel, Dios le confirmó a Jacob la promesa que había hecho con su abuelo Abraham y su padre Isaac. Jacob ya había recibido esta promesa 20 años antes, en ese mismo lugar (Gen 28). En ese entonces, Jacob estaba huyendo de su hermano Esaú, quien lo quería matar por haberse quedado con la bendición del primogénito. Pero ahora que Jacob regresaba a la Tierra Prometida, junto con toda su familia, Dios se lo volvió a comfirmar a él y a su descendencia.
Jacob recibió el nombre de “Israel”, y sus doce hijos serán llamados “los Hijos de Israel”. Todos ellos serán parte de la promesa de “Tierra y descendencia”.
Éstos son los hijos de Jacob (Israel) en el orden de su nacimiento:
- Rubén
- Simeón
- Levi
- Judá
- Dan
- Neftalí
- Gad
- Aser
- Isacar
- Zabulón
- José
- Benjamín
¿12 ó 13 Tribus?
Cada uno de los hijos Jacob se convirtió en cabeza de las 12 Tribus de Israel. Pero, ¿sabía usted que en realidad hay 13 tribus? Permítame explicar…
Cada hijo de Israel recibió el derecho a formar una tribu del pueblo de Israel, excepto por José que recibió dos. Los dos hijos mayores de José: Manasés y Efraín, fueron adoptados por Jacob como hijos, y como tales les fue dado a cada uno el derecho a formar una tribu entre el pueblo de Israel.
Génesis 48:5-6 – «Y ahora tus dos hijos Efraín y Manasés, que te nacieron en la tierra de Egipto, antes que viniese a ti a la tierra de Egipto, míos son; como Rubén y Simeón, serán míos: (6) Y los que después de ellos has engendrado, serán tuyos; por el nombre de sus hermanos serán llamados en sus heredades»
¿Por qué a José le fueron dadas dos tribus en lugar de sólo una?
Esta era parte de la doble herencia que recibía el primogénito.
Para entender esto, debemos saber lo que representaban los derechos de primogenitura en tiempos bíblicos. Esto lo veremos mas adelante…
- Derechos de primogenitura:
Antes de morir el patriarca de una familia, éste reunía a sus hijos a su alrededor para bendecirlos. Al primogénito lo bendecía de una manera especial, ya que éste se convertiría en el próximo patriarca de la familia. La gran responsabilidad del primogénito iba acompañada de ciertos privilegios…
Los derechos del primogénito eran los siguientes:
- Autoridad en la familia (patriarcado).
- Doble porción de la herencia.
- El Nombre del padre (algo así como el “apellido”, hoy en día).
En el caso de Jacob, su primogénito, el primer nacido, era Rubén. Sin embargo, él no recibió la “bendición de la primogenitura”.
Génesis 49:1-4 – «Y llamó Jacob a sus hijos, y dijo: Juntaos, y os declararé lo que os ha de acontecer en los postreros días. (2) Juntaos y oíd, hijos de Jacob; y escuchad a vuestro padre Israel. Rubén, tú eres mi primogénito, mi fortaleza, y el principio de mi vigor; principal en dignidad, principal en poder. Impetuoso como las aguas, no serás el principal, por cuanto subiste al lecho de tu padre; entonces te envileciste, subiendo a mi estrado»
La Biblia cuenta que Rubén se acostó con una de las concubinas de Jacob – (Gen. 35:22). Esto le costó su primogenitura.
Pero si Rubén no recibió la bendición de primogénito, ¿a quién le fue dada? Los que le seguían en orden de nacimiento eran Simeón y Levi, pero tampoco ellos recibieron este derecho por la vergüenza que hicieron pasar a Jacob al vengarse de la violación de su hermana Dina – (Gen 34).
Génesis 49:5-7 – «Simeón y Leví son hermanos: Instrumentos de crueldad hay en sus habitaciones. (6) En su secreto no entre mi alma, ni mi honra se junte en su compañía; que en su furor mataron varón, y en su voluntad arrancaron muro. (7) Maldito su furor, que fue fiero; y su ira, que fue dura: Yo los apartaré en Jacob, y los esparciré en Israel»
Ni Rubén, ni Simeón, ni Levi recibieron la bendición del primogénito. En el primer libro de Crónicas explica a quien le fue dado este privilegio:
1 Crónicas 5: 1-2 – «Los hijos de Rubén primogénito, de Israel (porque él era el primogénito, mas como violó el lecho de su padre, sus derechos de primogenitura fueron dados a los hijos de José, hijo de Israel, y no fue contado por primogénito; bien que Judá llegó a ser el mayor sobre sus hermanos, y el príncipe de ellos; mas el derecho de primogenitura fue de José»
Los derechos de primogenitura (autoridad, doble porción y el nombre del padre) fueron divididos entre José y Judá. Veamos uno por uno:
1. Autoridad – (para Judá):
A Judá le fue dada la autoridad entre los hijos de Israel.
Génesis 49:8-10 – «Judá, te alabarán tus hermanos: Tu mano en la cerviz de tus enemigos: Los hijos de tu padre se inclinarán a ti. (9) Cachorro de león es Judá: De la presa subiste, hijo mío: Se encorvó, se echó como león, así como león viejo; ¿quién lo despertará? (10) No será quitado el cetro de Judá, ni el legislador de entre sus pies, hasta que venga Silo; y a él se congregarán los pueblos»
Judá recibió el honor de ser la tribu real de Israel, representada por el “cetro”, símbolo de gobierno. De su linaje iban a venir los reyes de Israel, el primero de los cuales fue David.
[Nota – El primer rey fue Saúl, de la tribu de Benjamín, pero él fue el rey conforme al deseo del pueblo, mientras que David fue el rey conforme al corazón de Dios]
La bendición que Jacob le dio a Judá es una “sombra profética” del Mesías Yeshua (Jesús), quien viene de la tribu de Judá, específicamente del linaje de David. La palabra “Silo” literalmente significa: el Enviado.
2. Doble porción – (para José):
Como ya mencionamos, el primogénito recibía una doble porción de la herencia. En el caso de Jacob, él dio la doble porción a José, en la forma de tribus.
A José le tocaron dos tribus, representadas por sus hijos Efraín y Manasés – (Gen. 41:50-52). Ambos hijos habían nacido en Egipto, pero Jacob los adoptó. Así fueron recibidos al mismo nivel que el resto de la descendencia de Jacob – (Gen. 48:5-6). Esta es una bella imagen de cómo el Señor adopta a los gentiles para formar parte de la familia de Dios – (Rom. 11:24-26; Rom. 8:14-17).
La tribu de “José” se multiplicó en dos:
- Tribu de Efraín.
- Tribu de Manasés.
Por esta razón se sabe que eran 13 tribus. Sin embargo, la Biblia habla de 12 tribus de Israel porque en la repartición de la Tierra Prometida se les dio territorios a todas las tribus (12), menos a Levi, ya que esta tribu fue apartada para servir a Dios. A ellos sólo se les asignaron ciudades levitas repartidas por todo el territorio de Israel.
3. El Nombre del Padre – (para José):
Cuando Efraín y Manasés fueron adoptados por Jacob, uno de ellos recibió uno de los derechos del primogénito: el nombre del padre.
Génesis 48:8-16 – «Y vio Israel los hijos de José, y dijo: ¿Quiénes son éstos? Y respondió José a su padre: Son mis hijos, que Dios me ha dado aquí. Y él dijo: Acércalos ahora a mí, y los bendeciré. Y los ojos de Israel estaban tan agravados por la vejez, que no podía ver. Les hizo, pues, acercarse a él, y él les besó y les abrazó. Y dijo Israel a José: No pensaba yo ver tu rostro, y he aquí Dios me ha hecho ver también a tu descendencia. Entonces José los sacó de entre sus rodillas, y se inclinó a tierra. Y los tomó José a ambos, Efraín a su derecha, a la izquierda, de Israel, y Manasés a su izquierda, a la derecha de Israel; y los acercó a él. Entonces Israel extendió su mano derecha, y la puso sobre la cabeza de Efraín, que era el menor, y su mano izquierda sobre la cabeza de Manasés, colocando así sus manos adrede, aunque Manasés era el primogénito. Y bendijo a José, diciendo: El Dios en cuya presencia anduvieron mis padres Abraham e Isaac, el Dios que me mantiene desde que yo soy hasta este día, el Ángel que me liberta de todo mal, bendiga a estos jóvenes; y sea perpetuado en ellos mi nombre, y el nombre de mis padres Abraham e Isaac, y multiplíquese en gran manera en medio de la tierra»
Jacob no sólo los adoptó, sino que les dio la bendición de Abraham (tierra y descendencia). Además, dijo que en ellos sería perpetuado su nombre: Israel.
Pero, entre los dos hijos de José, uno iba a ser “el mayor”, quien se quedaría con el derecho de la primogenitura…y para sorpresa de José, no iba a ser el hijo que nació primero.
Génesis 48:17-22 – «Pero viendo José que su padre ponía la mano derecha sobre la cabeza de Efraín, le causó esto disgusto; y asió la mano de su padre, para cambiarla de la cabeza de Efraín a la cabeza de Manasés. Y dijo José a su padre: No así, padre mío, porque éste es el primogénito; pon tu mano derecha sobre su cabeza. Mas su padre no quiso, y dijo: Lo sé, hijo mío, lo sé; también él vendrá a ser un pueblo, y será también engrandecido; pero su hermano menor será más grande que él, y su descendencia formará multitud de naciones. Y los bendijo aquél día, diciendo: En ti bendecirá Israel, diciendo: Hágate Dios como a Efraín y como a Manasés Y puso a Efraín antes de Manasés. Y dijo Israel a José: He aquí yo muero; pero Dios estará con vosotros, y os hará volver a la tierra de vuestros padres. Y yo te he dado a ti una parte más que a tus hermanos, la cual tomé yo de mano del amorreo con mi espada y con mi arco”»
[Nota: En la tradición hebrea, la mano derecha bendice al mayor, la izquierda al menor.]
En la bendición a los hijos de José, Jacob profetizó que Manasés iba a ser un pueblo grande. Pero luego señaló que Efraín, iba a ser el principal, y su tribu iba a formar una Multitud de naciones (Melo HaGoyim). Esta palabra en hebreo significa literalmente; “plenitud de los gentiles”.
Como toda profecía, las palabras no se entienden en el momento, sino hasta después…
Seguramente José y sus hijos no sabían lo que estas palabras significaban. Pero ahora, con el beneficio de la retrospectiva histórica, podemos entender lo que Jacob quiso decir. Esto es precisamente lo que descubriremos a lo largo de este estudio…Veremos el rol que jugará Efraín, y quiénes son ahora.
Tal vez mucha gente pasa por alto estos detalles de la primogenitura entre el pueblo de Israel, pero son datos importantes para entender quién conforma el pueblo de Israel, y cómo se dividieron. También es importante para entender la distinción que se hace entre Judá y Efraín en la profecía bíblica. Por ahora, lo que debemos entender es que a Efraín le fue dado el derecho de llevar el nombre de “Israel”.
En el proximo estudio nos adentraremos a lo que ocurrió desde los tiempos de la muerte de Jacob hasta los tiempos de Salomón donde hay mucha tela que sacar y donde la historia comienza a ponerse mas emocionante….
(No te pierdas las próximas partes en: Israel – Las dos casas)